Se trata del funicular del pueblo de Bulnes, en Asturias. Esta ubicado en pleno corazón de los Picos de Europa rodeado de montañas y sin carreteras.
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Un pueblo completamente aislado en las montañas de Asturias no conoce las carreteras. Solamente caminando o accediendo al funicular podrás visitar al pueblo de Bulnes.
Bulnes, el pueblo de Asturias al que solo se llega por funicular
Se encuentra en pleno corazón de los Picos de Europa y es sin dudas un paraíso para los amantes de la naturaleza.
Aquí no se observan motos, coches o autobuses. Bulnes es un precioso municipio ubicado a los pies del famoso Naranjo de Bulnes (Picu Urriellu en asturiano) que está rodeado de montañas y al que solo puedes acceder andando o en funicular.
Este pueblo completamente aislado y con menos de 40 habitantes censados ofrece al visitante un lugar mágico donde los paisajes naturales se funden con sus casas empedradas. El destino perfecto para los amantes del turismo rural.
Curiosidades de Bulnes en las montañas de Asturias y su funicular
Bulnes no tuvo energía eléctrica hasta 1988 y es considerado el pueblo más aislado de Asturias. Antes del funicular, su única vía de conexión era a través de La Canal del Texu. La razón para construir un funicular fue la gran dificultad geográfica para construir una carretera. Sus horarios son de 10:00h a 12.30h. y de 14:00h a 18:00h. El boleto de ida y vuelta cuesta 22,16 euros, mientras que uno sólo tiene un precio de 17,61 euros.
Las dos opciones para llegar al pueblo de Bunes en Asturias: caminando o en funicular
Hay dos opciones para llegar a Bulnes. La primera es realizar la ruta de senderismo desde Poncebos. A través de un sendero no muy complicado, lo puedes hacer en familia si estás acostumbrado a caminar. La distancia será de unos 8 kilómetros en un tiempo estimado de 2h y media ida y vuelta con un desnivel de 500 metros de subida y bajada.
La otra opción es subir en funicular. La carretera para llegar hasta allí es la AS-224. Podrás dejar el coche en el aparcamiento del funicular. Esta es una de las opciones que más suelen coger los visitantes. El funicular lleva en funcionamiento desde el pasado 2011, y bajo las montañas asturianas, podrás subir en menos de 10 minutos una longitud de 2 kilómetros. Es sin duda la perfecta opción para aquellos que no les gusta caminar demasiado o para esos días en los que el tiempo no acompaña. También tienes la alternativa de subir andando y bajar en funicular.
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