El Gobierno modifica tres cambios en las PCR para entrar en España.
El Gobierno ha establecido tres cambios sobre las PCR para entrar en España. A partir de este 10 de diciembre se flexibilizará las pruebas de contagios del coronaviruso para la entrada de personas al terriorio español.
El Gobierno impondrá tres cambios sobre las PCR para entrar en España. El Ejecutivo pretende flexibilizar la entrada de personas a territorio español con motivo de la Navidad, sobre todo de estudiantes y trabajadores en el extranjero.
Tras la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad, este 10 de diciembre se publicará una resolución en la que se aplicarán tres aspectos modificados sobre la exigencia de una PCR 72 horas antes de llegar a España en avión.
El primer cambio consiste en que Sanidad «dará por bueno» las pruebas de plasma sanguíneo (Ampliación Mediada por Trascripción) como sustitutas de las PCR.
El segundo cambio está basado en el idioma. A partir de este jueves, se va a permitir la «acreditación» o el resultado de los test en francés y alemán, idiomas que se suman al español e inglés, que eran lenguas admitidas desde el principio.
El tercer cambio que se establecerá será sobre la exención de pruebas PCR negativas a niños menores de seis años. Estas son los tres cambios con los que el gobierno pretende flexibilizar, en cierto grado, la entrada de personas a España desde el exterior.
Una de las medidas que se han llevado a cabo durante la segunda ola de casos de coronavirus, ha sido la obligación de presentar una prueba negativa de Covid-19 para poder entrar al país. Una medida que ya habían llevado a cabo varios países europeos y americanos.
El pasado 23 de noviembre entró en vigor esta medida que obligaba a los viajeros a presentar una PCR negativa 72 horas antes de coger el vuelo hacia España. Sanidad publicó un listado con los países de origen que eran considerados de riesgo, basada en las altas tasas de incidencia del coronavirus.
El incumplimiento de presentar una PCR negativa para entrar en España está penado con sanciones económicas de entre 3.000 euros y 60.000€. Llegando hasta los 600.000€ en los casos más graves.
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