Las empresas de limpieza alertan del peligro de contagio en medios de transporte y aseguran que faltan medidas de seguridad.
Varias empresas de limpieza, junto a la patronal, alertan del riesgo de contagio que puede suponer utilizar los medios de transporte. Estas compañías aseguran que la higiene es «insuficiente» en aviones, trenes y autobuses». Faltan mayores medidas de seguridad para asegurar una suficiente seguridad en los clientes.
Riesgo de contagio
La Asociación Profesional de Empresas de Limpieza (Aspel), que agrupa las empresas concesionarias de servicios de limpieza en los principales medios de transporte han alertado de que «la limpieza que se realiza en trenes, buses y aviones es insuficiente teniendo en cuenta el contexto en el que nos encontramos tras la pandemia».
El presidente, Juan Díez de los Ríos, va más allá y especifica que «no hay limpieza en las escalas, ni cuando bajan y suben viajeros con el riesgo de contagio que esto implica».
El problema que le ven los principales sindicatos es el aumento de actividad en el transporte y la apertura de fronteras internacionales. Un aumento que no ha sido acompañado por el incremento de plantillas de limpieza, lo que hace imposible controlar todas las medidas de seguridad con el escaso personal.
Escasa desinfección en Barajas
La situación más grave se vive en los aviones y aeropuertos, destacando la situación de Barajas. Por otro lado, Renfe y las empresas de autobuses están incrementando exponencialmente las medidas. Renfe, en su caso, ha puesto una persona de limpieza en los trenes, que limpia botones, puertas, baños y reposacabezas.
Sin embargo, la situación en aviones y aeropuertos no parece tan avanzada. Ernesto Iglesias, responsable de vuelos de USO, explica que «Iberia sí ha reforzado ligeramente los protocolos de limpieza, pero otras compañías como Ryanair no tienen apenas personal dedicado a ello». En Madrid-Barajas, Aena impuso un protocolo exigente de limpieza durante la pandemia, pero con la vuelta de la actividad de pasajeros, estas medidas son insuficientes.
Las empresas que se dedican a la limpieza del aeropuerto madrileño recuperan a trabajadores del ERTE a cuenta gotas. Sólo hay 145 activos de los 650 empleados de limpieza habituales. Unas medidas que necesitan ser revisadas y aumentadas cuanto antes.