Así es la hiperhidrosis, una condición médica que puede afectar la calidad de vida de quienes la padecen. Condición que puede provocar inconvenientes en el ámbito laboral y social.
La hiperhidrosis es una condición médica que se caracteriza por un aumento excesivo de la sudoración, que puede afectar la calidad de vida de quienes la padecen.
Esta afección puede provocar inconvenientes en el ámbito laboral y social, ya que puede llegar a empapar la ropa, utensilios de trabajo e incluso causar el goteo de sudor que moje el suelo.
Según estadísticas, afecta aproximadamente al 1% de la población y casi la mitad de los casos tienen carácter hereditario.
El exceso de sudoración en la hiperhidrosis es en su mayoría provocado por estímulos térmicos y emocionales.
Estos factores de estrés pueden variar desde hablar en público hasta el miedo a diversas situaciones o al propio rubor.
Además, ciertos tratamientos farmacológicos también pueden ser una causa.
Además de la sudoración excesiva, esta condición puede traer otras complicaciones.
Tales como la maceración, el mal olor o bromhidrosis, sobreinfección cutánea por bacterias en las plantas de los pies y desarrollo de dishidrosis y dermatitis de contacto en las palmas de las manos.
Como tratamiento tópico inicial se pueden utilizar fármacos anticolinérgicos, como el bromuro de glicopirronio.
También astringentes y curtientes , como el cloruro de aluminio, el glutaraldheído o el ácido salicílico.
Una segunda opción incluye tratamientos sistémicos como el bromuro de propantelina, tranquilizantes y sedantes, y los antagonistas del calcio.
La toxina botulínica, también conocida como botox, es un tratamiento indicado para casos de sudoración intensa en manos o axilas.
Este tratamiento funciona mediante el bloqueo selectivo de la acción de la acetilcolina sobre las glándulas ecrinas, disminuyendo así la producción de sudor.
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