Sanidad estudia retrasar, hasta seis meses, la vacunación a sanitarios menores de 55 años ya contagiados debido a los anticuerpos generados.
Sanidad estudia retrasar la vacunación a sanitarios menores de 55 años ya contagiados. El hecho de que estas personas tendrían anticuerpos, hace plantear a España retrasar la vacunación hasta seis meses.
Retrasar la vacunación a sanitarios
Sanidad está estudiando retrasar la vacunación de aquellos sanitarios menores de 55 años ya contagiados, y que hayan pasado la enfermedad sin problemas.
Atrasar la inmunización de estos profesionales hasta seis meses, debido a la generación de anticuerpos.
Así, el Ministerio de Sanidad ha afirmado que se «podrá posponer la vacunación del personal sanitario de primera línea (grupo 2) y del otro personal sanitario y sociosanitario (grupo 3) hasta que transcurran seis meses de la fecha de diagnóstico«.
El Ejecutivo estudia esta decisión debido a las evidencias en cuanto al tiempo de inmunidad tras la infección y a la «baja frecuencia de casos de reinfección».
La escasez de dosis ha hecho que algunos científicos modifiquen los planes de vacunación. La comprobación de que las personas que han superado la Covid-19 generan anticuerpos y les protegen de una reinfección han hecho que se reestructuren los grupos de vacunación. Así, algunos expertos consideran que las personas con anticuerpos les sería suficiente una única dosis para reforzar su sistema inmunitario.
70% población inmunizada en verano
Antes de comenzar con los planes de vacunación, tanto en España como en los países de la Unión Europea se marcaron el objetivo de alcanzar la inmunidad de rebaño a finales del verano. Es decir, alcanzar la inmunización del 70% de la población.
Sin embargo, los contratiempos que han surgido hacen que este objetivo sea difícil de conseguir. La escasez de dosis, las dificultades logísticas de las farmacéuticas y las tensiones comerciales, han complicado la vacunación masiva.
Hasta la fecha, en España se han administrado más de 2,1 millones de dosis (casi el 90% de las vacunas recibidas). Esto supone que sólo se ha conseguido la inmunización del 1,5% del total de la ciudadanía española, en estos dos meses.
Estas dificultades han provocado que se comience a plantear distribuir mejor las dosis entre las personas que ya han pasado la enfermedad. Algunos expertos han planteado que «cambiar la política de vacunación evitaría dolores innecesarios, liberarían muchas dosis de vacunas y no afectaría negativamente a la cantidad de anticuerpos».