El miedo al colapso sanitario y la desatención de otros pacientes pone en jaque la Atención Primaria en los próximos meses
Los profesionales de Enfermería temen un colapso sanitario por la vacunación masiva del coronavirus: piden 15.000 nuevos profesionales para afrontar la campaña y un calendario de vacunación realizado por expertos. Los ya saturados centros de Atención Primaria denuncian la sobrecarga de trabajo y piden nuevos medios.
Enfermería teme el colapso por la vacunación
El colectivo de enfermeras denuncia el enorme riesgo al que se enfrentan en los próximos meses. Nunca antes han realizado una tarea así: vacunar a 47 millones de personas no es sencillo.
La probabilidad de colapso es grande, y el objetivo principal es que las primeras dosis lleguen a los sanitarios y mayores. Para que toda la población esté vacunada en mayo, como prevé Salvador Illa, necesitan que se contrate a 15.000 profesionales.
Manuel Cascos, presidente del Sindicato de Enfermería de España, lo ha dejado claro: «Insistimos en la necesidad de contar con enfermeras y enfermeros suficientes, al ser los profesionales sanitarios encargados de su administración. Estaremos muy vigilantes y denunciaremos cualquier situación que se produzca en aras de mejorar la campaña».
El incremento de casos ha hecho que los médicos y enfermeras tengan miedo a un triple colapso: el ocasionado por la gripe, el provocado por el coronavirus y el de la vacuna. Con la carga de trabajo para vacunar a millones de personas en cuestión de semanas, se teme que otros enfermos no reciban la atención que necesitan. España cuenta con 6 profesionales de la salud para cada 1000 habitantes, dos menos que el resto de Europa.
«Será muy importante contar con la opinión experta de los profesionales para hacer una buena planificación y diseñar estrategias de implementación de centros de vacunación masiva», ha enfatizado el presidente del Sindicato de Enfermería. Y recuerda, la vacunación ha de realizarse por Enfermería: «siempre en los centros sanitarios y por parte de los profesionales sanitarios competentes y cualificados para ello», por lo que delegar la tarea en otros trabajadores no es una opción.
«Sin duda, supondrá un enorme esfuerzo para las enfermeras y enfermeros españoles, pero somos conscientes de la importancia que tiene para poder hacer un buen control de la enfermedad», han recalcado.
