¿Cuánta gente percibe la pérdida del olfato como síntoma de COVID?
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El COVID -19 ha azotado el mundo en este 2020 y por esa razón los científicos y profesionales han estudiado sus síntomas, entre ellos el síntoma de la pérdida del olfato.
Los principales síntomas que se perciben y los más habituales suelen ser: fiebre, tos seca y cansancio. Incluso los más preocupantes según el personal de Sanidad, que son: dificultad para respirar, dolor en el pecho e incapacidad para moverse.
Sin embargo, ante esta pequeña lista se deben sumar los síntomas menos comunes:
Esta última, la pérdida del olfato o del gusto detecta rápidamente la permanencia del virus en el cuerpo. Cuatro de cada cinco personas que lo experimentan dieron positivo a al coronavirus, de los cuales se registra que un promedio del 40 por ciento, no registró otros síntomas de los anteriormente nombrados, cifras dadas por el estudio que publicó la revista PLOS Medicine, el cual realizó Rachel Batterham, la profesora del University College de Londres.
Es el estudio en el cual se conoce la cantidad de gente que se ha infectado de una enfermedad. Según esto, los investigadores del University College de Londres inscribieron a 590 personas, las cuales habían informado anticipadamente que habían sufrido la pérdida del olfato o del gusto hace algunos días, semanas e incluso el mes anterior.
De la cantidad de personas que fueron registradas por los profesionales, 567 de ellas se sometieron a la prueba de anticuerpos. Debido al estudio realizado, se llegó a una posible probabilidad, y es que el síntoma de la pérdida del olfato es mucho más específico que la pérdida del gusto. Siendo así, esta pérdida de sentido, debería tenerse más en cuenta en la prevención y las medidas de salud pública. Y así, prevenir que la gente que lo experimente esté en lugares concurridos, sin aislamiento y sin un tratamiento.
Ante este nuevo descubrimiento, queda claro que lo recomendado por algunos profesionales y sobre todo por responsables políticos, quienes en su discurso descartan ante la población que la sensación de perder los sentidos no es síntoma del virus y que ante esto no se debe realizar el autoaislamiento. El estudio hecho, demuestra lo contrario, dándole prioridad al síntoma como principal motivo de detección.
Incluso durante el estudio se revela que los síntomas claves para la detección según los centros de salud, como la tos y la fiebre, pueden tener fallas y estos pueden ser producidos por alguna otra razón, en cambio, la pérdida se olfato se debería catalogar como una urgencia a nivel mundial y declarada como un síntoma clave del COVID.
«Nuestros hallazgos sugieren que las personas que notan una pérdida en su capacidad para oler todos los días los olores domésticos, como el ajo, el café y los perfumes, deben aislarse y buscar pruebas de PCR. Los responsables políticos deben reconocer globalmente la pérdida del sentido del olfato, como un síntoma clave del Coronavirus«, informan los investigadores.
Con la pérdida del olfato también se altera la percepción del sabor de la comida, esto debido a que las partículas volátiles de los alimentos estimulan el sentido del olfato por vía retronasal.
Cerca de un 20% de los afectados por el virus y por el síntoma, no recuperan el sentido en su totalidad y resultan presentando inconvenientes para identificar ciertos olores. Se estima que gran parte de los contagiados por coronavirus, quedan con secuela.
Según expertos es posible entrenar el sentido, tanto de olfato como del gusto, y por ende recuperarlo, siempre y cuando el daño no sea estructural. El primer paso que debe hacer la persona que resulta afectada por el síntoma es dirigirse a un especialista para así, descartar daños relacionados con la pérdida. Según estudios:
«Se estima que entre un 70 y 80% de las personas con trastornos olfativos no estructurales pueden llegar a recuperar el olfato entrenándolo».
Existen diversos tratamientos que funcionan para recuperar la pérdida del olfato. Y el que más ha demostrado efectividad hasta el momento es el entrenamiento olfativo, según Raimundo Gutiérrez, secretario general de la Sociedad Española de Otorrinolaringología.
El sistema consiste en entrenar y rehabilitar el olfato para ejercitar de cierta manera, la memoria olfativa y de a poco ir recuperando el sentido, no solo del olfato sino también del gusto.
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