Hacienda pretende subir el IVA de las bebidas azucaradas un 11% para favorecer hábitos de vida saludable.
Hacienda pretende subir el IVA a las bebidas azucaradas: del 10% que tienen ahora al 21. El objetivo del Ministerio de Consumo llevado por Alberto Garzón es «internalizar la externalidad negativa generada por el consumo de dichas bebidas, favoreciendo hábitos más saludables de la población».
Si se aprueba, la medida recaudará 400 millones de euros en los dos próximos años.
Hacienda sube el IVA de las bebidas azucaradas
Los nutricionistas y expertos ya desde hace años indican las consecuencias negativas de consumir azúcar. Mientras que el de las frutas es natural, bueno y necesario, el azúcar y los edulcorantes añadidos a bebidas aumenta el riesgo de sufrir sobrepeso, obesidad y enfermedades cardiovasculares o diabetes.
Es por ello que Hacienda pretende imponer un IVA del 21% a este tipo de bebidas, incluyendo los refrescos, batidos industriales e isotónicas.
El nuevo impuesto ha sido incluido en el Plan presupuestario que Pedro Sánchez ha remitido a Bruselas ayer. Si finalmente se aprueba, este incremento del 11% en el impuesto sobre el valor añadido recaudará solo el año que viene más de 340 millones de euros. El objetivo principal es interiorizar en la conciencia alimentaria de la población que estas bebidas no están indicadas para el consumo diario y que se deben sustituir por agua, tés o bebidas saludables sin azúcares añadidos. De este modo se podría al fin «seguir las recomendaciones de numerosos organismos internacionales que piden a España limitar la aplicación de tipos reducidos de IVA», como ya se hace en Reino Unido, Francia y algunos estados de Estados Unidos.
Esta medida, no es nueva. Cristóbal Montoro (Ministro de Hacienda entre 2011 y 2018) ya la intentó implantar pero las protestas del sector de los refrescos le echaron atrás. Este impuesto es criticado por las empresas y es por ello que ha motivado la creación de bebidas «cero azúcar» de algunas marcas conocidas.
La idea principal es «favorecer hábitos de vida más saludables» ante el aumento gradual de obesidad entre la población y sobre todo los niños, que afecta al 23% de familias con rentas bajas según el Gobierno.
