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Distinguir las diferencias y similitudes de los tres virus: resfriado, coronavirus y gripe. Es muy importante a la hora de tomar precauciones. Ahora que llega el otoño y comienzan los resfriados y gripes estacionales, Sanidad teme un doble colapso en hospitales y centros de atención primaria y advierte de la gravedad de contraer ambos virus, de la gripe y el coronavirus, por eso insiste en vacunarse este octubre.
Si diferenciar el resfriado de la gripe ya era complicado para algunos, este otoño e invierno se presenta difícil ante la incertidumbre de la evolución de la pandemia en el mundo, donde se han sobrepasado el millón de muertos.
Cuanto antes sepamos a qué virus nos enfrentamos, antes podemos empezar a paliar los síntomas. Lo más importante es contactar con nuestro médico o farmacéutico y no automedicarnos.
La gripe produce fiebres altas, cansancio extremo, dolor muscular, tos, dolor de cabeza y/o garganta, congestión y en algunos casos diarrea o vómitos. Este patrón es casi idéntico en el coronavirus, la diferencia principal es que el nuevo virus del Covid-19 produce en muchos casos la pérdida del olfato y el gusto, llamada anosmia.
Además, gripe y coronavirus se contraen de una forma muy similar: a través de las gotas de saliva que expulsamos al hablar, toser o estornudar y que permanecen en el aire. La diferencia principal es la gravedad, ya que en el coronavirus hay más probabilidades de ingresar en planta o incluso en UCI, y como desgraciadamente se ha comprobado, de muerte. Cuando nos contagiamos de gripe, los síntomas aparecen un día o dos después del contacto con una persona infectada, mientras que en el caso del coronavirus es entre 4 y 14 días en los que debemos permanecer en casa para evitar la propagación.
Los principales síntomas son la fiebre, el cansancio, la fatiga y/o dificultad para respirar y la tos seca. Otras molestias comunes son la pérdida de gusto y olfato, la congestión, el dolor de cabeza y la diarrea. En algunos casos también produce erupciones cutáneas, dolor de garganta o conjuntivitis. En la mayoría de los casos son síntomas leves que avanzan de forma muy gradual, dándose el pico con síntomas más graves el día ocho o nueve desde el inicio en muchos pacientes, y avanzando a partir de ahí hacia la recuperación. En el caso de la gripe, sin embargo, los síntomas van apareciendo de forma más abrupta.
Esta es la patología más leve. Normalmente no da fiebre, y los síntomas se centran en la congestión nasal, los estornudos, la tos con expectoración y la secreción lagrimal. No se produce diarrea y no es demasiado común sufrir dolor de garganta o diarrea.
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