Estéticamente la gran mayoría de las verduras no resulta apetitosa, pero comer también su piel podría ser beneficioso. 4 alimentos que vale la pena comer con piel.
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Seguramente son muchos los alimentos cuyas pieles probablemente no habías pensado en consumir nunca por su sabor amargo, su textura o dificultad para masticar… ¡Te estás equivocando! De hecho la piel de algunas frutas y verduras incorpora a tu cuerpo muchos nutrientes beneficiosos para la salud.
Comer alimentos con su piel: los beneficios
Existen beneficios de comer la piel, o la cáscara de muchas frutas, y vegetales. No obstante muchas de estas no se ven apetitosas, o hay miedo higiénico de que puedan resultar perjudiciales para la salud desde el punto de vista sanitario.
Por eso se debe lavar muy bien y retirar las partes ennegrecidas, o dañadas para así tener un mejor consumo. Sin embargo lo más que se resalta no es el consumo de las frutas y verduras con piel o sin ella, sino la abundancia que haya de las mismas en nuestra dieta.
La patata
Consumir la patata con piel puede tener sus ventajas y desventajas si no se conoce de la misma. Es decir, esta verdura es rica en fibra, y fortalece la microbiota intestinal. Además contiene vitamina C, necesaria en la lucha contra los radicales libres. No obstante esta vitamina se puede perder en la cocción. Pero con la cáscara de la patata se debe tener cuidado ya que podría llegar a ser tóxica. Se trata de la sustancia denominada solanina que se encuentra en las zonas verdosas de la patata, y las mismas deben ser eliminadas para eliminar esa toxicidad.
La calabaza y la berenjena
Podemos hablar de la calabaza con su alto contenido en caroteno. La piel de esta verdura acumula cantidades grandes de proteínas, fibras, y potasio que en la verdura misma.
La berenjena tiene muchos beneficios para nuestra salud, pues en ella se encuentra vitaminas como la A, B1, B2, C, sales de potasio, magnesio, fósforo, azufre, cloro, calcio, sodio, y propiedades que ayudan a la calcificación de los huesos, cicatrización de úlcera, y propiedades diuréticas y laxantes. Al igual que la patata, la berenjena tiene zonas veres que hay que evitar ya que contienen la misma toxina llamada solanina.
El tomate
El tomate es mejor consumirlo con su piel. Tiene un alto contenido de licopeno, un fitoquímico con un potente efecto antioxidante. Además contiene quercetina, un flavon
oide con una actividad anti inflamatoria, anti cancerígena, y su riqueza en vitamina C.