La integración de los gastos por desastres naturales en el presupuesto de defensa

Temas cubiertos
Introducción a la relación entre cambio climático y defensa
En los últimos años, la intersección entre el cambio climático y la defensa nacional ha cobrado una relevancia sin precedentes. Los fenómenos climáticos extremos, como inundaciones e incendios, no solo afectan a la población civil, sino que también impactan directamente en la operatividad de las fuerzas armadas.
Este artículo examina cómo los gobiernos están adaptando sus presupuestos de defensa para incluir gastos relacionados con la gestión de emergencias y desastres naturales.
El presupuesto de defensa y la gestión de emergencias
Recientemente, el Gobierno español ha decidido incluir en su Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa una partida significativa destinada a la gestión de emergencias provocadas por desastres naturales.
En 2025, se destinarán más de 10.471 millones de euros, de los cuales 232 millones se asignarán específicamente para la respuesta a situaciones de emergencia como las inundaciones. Este enfoque refleja una tendencia creciente entre los países de la OTAN, que están reconociendo la necesidad de integrar estos gastos dentro de sus presupuestos de defensa.
La necesidad de resiliencia ante desastres naturales
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha enfatizado la importancia de que sus miembros fortalezcan su resiliencia ante una variedad de riesgos, que van desde desastres naturales hasta amenazas híbridas. Este enfoque estratégico busca garantizar que los Estados puedan resistir y recuperarse de cualquier tipo de amenaza. La creciente frecuencia de fenómenos climáticos extremos ha llevado a los ejércitos a intervenir en apoyo de la protección civil, especialmente cuando los recursos nacionales se ven desbordados, como se evidenció durante la pandemia y en recientes inundaciones en España.
Inversiones en equipamiento y formación
Para hacer frente a estos desafíos, es crucial que los gobiernos inviertan en equipamiento y formación del personal militar. La adquisición de helicópteros multipropósito y vehículos especializados son solo algunas de las medidas que se están tomando para mejorar la capacidad de respuesta ante catástrofes. Además, es fundamental que el personal militar reciba la formación adecuada para operar en escenarios de crisis, lo que a su vez contribuye a la seguridad nacional en un contexto global cada vez más inestable.
Conclusiones sobre el futuro de la defensa y el cambio climático
El cambio climático está redefiniendo el panorama de la defensa y la seguridad nacional. A medida que los gobiernos reconocen la necesidad de adaptarse a esta nueva realidad, es probable que veamos un aumento en la inversión en capacidades de respuesta a emergencias. La integración de estos gastos en los presupuestos de defensa no solo es una respuesta a las necesidades inmediatas, sino también una estrategia a largo plazo para garantizar la seguridad y la estabilidad en un mundo en constante cambio.