La empresaria confirma su testimonio sobre la entrega de efectivo en Madrid
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El testimonio de Carmen Pano ante el juez
La empresaria Carmen Pano ha vuelto a confirmar su declaración sobre la entrega de 90.000 euros en efectivo en la sede del PSOE en la calle Ferraz, Madrid. Este testimonio fue presentado el pasado 19 de marzo ante el juez Santiago Pedraz, quien está a cargo del caso relacionado con la trama de hidrocarburos que investiga la Audiencia Nacional.
Según el vídeo de su declaración, al que ha tenido acceso el medio El Independiente, Pano explicó que la entrega se realizó en dos partes, siguiendo las instrucciones del empresario Víctor de Aldama, quien también está siendo investigado.
Detalles de la entrega de dinero
Pano aclaró que no tenía conocimiento sobre la relación del dinero con la trama que se investiga ni con la concesión de un título de operadora para las empresas involucradas. «Cuando me dice que hay que llevar ese dinero a Ferraz porque él no puede, no me dice de qué o para qué es», afirmó. La empresaria indicó que el efectivo era un anticipo relacionado con uno de los negocios de Aldama, quien pretendía vender unos restaurantes situados en las Cuatro Torres de Madrid.
La investigación de la Guardia Civil
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha señalado que Aldama y su socio Claudio Rivas estaban al frente de esta trama, que se estima ha causado un fraude de 182,5 millones de euros entre noviembre de 2022 y febrero de 2024. En diciembre de 2024, cuando Pano fue detenida, afirmó que ella fue quien puso en contacto a los dos cabecillas de la banda. En uno de los informes enviados a la Audiencia Nacional, la UCO reveló que Aldama tenía una deuda de 1,5 millones de euros por un negocio de restauración en el complejo de las Cuatro Torres.
Relación empresarial y objetivos de la trama
Pano, quien conocía a Aldama desde hacía años, fue contactada para ayudar a encontrar a alguien dispuesto a invertir en su negocio. A partir de ahí, comenzó una relación empresarial en la que Pano actuaba como intermediaria. El objetivo final de Rivas era obtener la licencia de operador de hidrocarburos para Villafuel, una de las empresas implicadas en la trama. Este caso ha suscitado un gran interés mediático y ha puesto de relieve la complejidad de las redes de corrupción en el ámbito empresarial y político en España.
