La ciudad se encuentra en estado de emergencia tras el desbordamiento de ríos
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La devastación causada por las inundaciones
Ávila ha sido golpeada por una de las peores inundaciones en su historia reciente, un evento que ha llevado al alcalde, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, a declarar el estado de emergencia en la ciudad.
Las intensas lluvias han provocado el desbordamiento de los ríos Adaja y Chico, inundando garajes, bajos de casas, negocios y espacios públicos, incluyendo la emblemática plaza de toros y el estadio municipal Adolfo Suárez. Esta situación ha dejado a muchos ciudadanos en una situación crítica, con sus propiedades gravemente afectadas.
Evacuaciones y rescates en la ciudad
La magnitud de la crisis ha requerido la evacuación urgente de 41 niños y 3 monitores del colegio Santa Teresa de Jesús, quienes se encontraban en una residencia de espiritualidad. La rápida respuesta de los servicios de emergencia ha sido crucial para garantizar la seguridad de los más vulnerables, incluyendo a más de treinta religiosas que residen en el lugar, muchas de ellas con problemas de movilidad. Este tipo de evacuaciones son un recordatorio de la importancia de estar preparados ante desastres naturales.
Un evento sin precedentes en la historia de Ávila
El alcalde ha comparado la situación actual con las inundaciones de 1946, un evento que muchos residentes mayores aún recuerdan con claridad. En aquella ocasión, el agua alcanzó niveles alarmantes, afectando áreas que hoy están completamente edificadas. La preocupación ha crecido a medida que las lluvias continúan y las previsiones meteorológicas indican más precipitaciones y deshielo, lo que podría agravar aún más la situación. La Junta de Castilla y León ya había declarado el nivel 1 del Plan de protección civil ante el riesgo de inundaciones, pero ahora se ha elevado a nivel 2, reflejando la gravedad de la crisis.
