La Asociación de Fiscales critica la vinculación de la Fiscalía con el Gobierno español.
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En un contexto de creciente tensión política, la Asociación de Fiscales ha expresado su preocupación por las recientes declaraciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Durante una rueda de prensa, Sánchez manifestó su confianza en el fiscal general, Álvaro García Ortiz, lo que ha suscitado críticas sobre la posible vinculación entre la Fiscalía General y el Ejecutivo.
Esta situación ha llevado a la Asociación a cuestionar la autonomía de la institución, que debería ser independiente y ajena a los intereses políticos.
Preocupación por la falta de respuesta del fiscal general
La Asociación de Fiscales ha señalado que el silencio del fiscal general ante las afirmaciones de Sánchez es alarmante.
En su comunicado, argumentan que es fundamental que la Fiscalía mantenga su independencia y que cualquier insinuación de que está al servicio del Gobierno es inaceptable. «Nos parece tan preocupante que se vincule la Fiscalía con el Gobierno como el silencio de la institución ante semejante afirmación», afirmaron. Esta crítica se intensifica en un momento en que la Fiscalía enfrenta un procedimiento penal que afecta directamente a su propio fiscal general.
El borrado de mensajes del fiscal general
La controversia se agrava por el reciente informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que reveló el borrado de todos los mensajes del móvil de García Ortiz entre el 8 y el 14 de marzo de 2024. Este hecho ha sido calificado como un «claro indicio incriminatorio» en el marco de una investigación que involucra la posible revelación de secretos. La falta de claridad sobre este asunto ha llevado a la Asociación de Fiscales a exigir una respuesta contundente y transparente por parte de la Fiscalía General.
La necesidad de una comunicación clara
La Asociación ha solicitado un comunicado oficial que aclare la posición de la Fiscalía respecto al Gobierno y reafirme su independencia. «Sin duda, en cualquier otro momento, las palabras de un presidente patrimonializando al fiscal general habrían tenido una respuesta contundente de la propia Fiscalía», indicaron. La falta de una respuesta clara ha generado un clima de desconfianza y ha puesto en tela de juicio la imparcialidad de la Fiscalía en su labor de defensa de la sociedad.
En resumen, la situación actual plantea serias dudas sobre la independencia de la Fiscalía General en España. La Asociación de Fiscales ha hecho un llamado a la reflexión sobre el papel de esta institución en un entorno político cada vez más polarizado, donde la defensa de la justicia y la legalidad debe prevalecer sobre los intereses partidistas. La sociedad merece una Fiscalía que actúe con total autonomía y que esté al servicio de todos, sin distinciones ni influencias externas.
