El PNV y EH Bildu enfrentan posturas opuestas sobre el gravamen a las energéticas.
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Contexto del gravamen a las energéticas
El reciente decreto aprobado por el Gobierno español ha reavivado . Este nuevo gravamen ha generado tensiones entre el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y EH Bildu, que han elevado el tono de sus discusiones.
La medida, que incluye desgravaciones fiscales para inversiones en descarbonización, ha sido presentada por EH Bildu como un acuerdo con el Ejecutivo, buscando presionar al PNV para que reconsidere su postura de rechazo.
Las posturas de PNV y EH Bildu
EH Bildu argumenta que el PNV debería respaldar la prórroga del impuesto a las energéticas, ya que la medida incluye elementos que benefician a la economía vasca. Sin embargo, el PNV ha respondido con firmeza, considerando que la propuesta de EH Bildu es contradictoria, dado que hace apenas unos días apoyaron un gravamen que, según ellos, atenta contra el autogobierno vasco. Esta tensión ha llevado a EH Bildu a exigir al PNV que abandone sus excusas y apoye el decreto, argumentando que no hay razones válidas para oponerse a la medida.
Implicaciones económicas y políticas
El impacto económico de este gravamen es significativo, ya que se estima que podría generar ingresos anuales de 67 millones de euros para las arcas forales vascas. Sin embargo, el PNV insiste en que cualquier modificación del gravamen debe pasar por una reforma del Impuesto de Sociedades, lo que complica aún más la situación. La postura del PNV se alinea con su visión de que las cosas deben hacerse de manera adecuada, y no aceptarán un gravamen que no cumpla con sus criterios. Esta situación ha llevado a un estancamiento en las negociaciones, con ambos partidos firmemente posicionados en sus respectivas posturas.
