La nueva producción de la ópera de Donizetti explora la rivalidad entre dos reinas.
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Una obra maestra de Donizetti
El Teatro Real de Madrid se prepara para el estreno de Maria Stuarda, una de las óperas más emblemáticas de Gaetano Donizetti, que forma parte de su famosa Trilogía Tudor. Esta obra, que se centra en la compleja y trágica relación entre María I de Escocia e Isabel I de Inglaterra, promete ser un espectáculo cautivador que explora temas de poder, amor y rivalidad.
La producción, dirigida por David McVicar, se inspira en la obra de Friedrich von Schiller, quien retrata un intenso duelo entre dos reinas que luchan no solo por el trono, sino también por el corazón de un hombre.
La complejidad de los personajes
Según McVicar, la historia de amor entre María y el conde de Leicester, aunque ficticia, añade una dimensión política a la trama. El director escocés destaca la dificultad del conde para equilibrar sus ambiciones personales con las tensiones que surgen entre las dos reinas. Esta dualidad se convierte en el eje central de la narrativa, donde las decisiones de los personajes están marcadas por la polarización religiosa y política de la Europa del siglo XVI. La incapacidad de las reinas para comprenderse mutuamente es lo que, según McVicar, conduce a la tragedia, un tema que resuena con la división actual en el mundo.
Un reflejo de la actualidad
El director no puede evitar establecer paralelismos entre la Europa dividida de hace 400 años y la situación contemporánea. “La polarización que vivimos hoy en día es similar a la que enfrentaron estas dos mujeres”, afirma McVicar. Esta reflexión se intensificó durante los ensayos, que coincidieron con las elecciones estadounidenses, un momento que llevó al equipo a considerar las divisiones actuales en la sociedad. La producción no solo busca entretener, sino también invitar a la reflexión sobre las tensiones que persisten en la política y la religión.
Voces femeninas en el centro de la historia
La obra requiere de dos grandes voces femeninas, un desafío que Donizetti enfrentó en su momento. En esta producción, las sopranos Lisette Oropesa y Yolanda Auyanet interpretarán a las reinas, mientras que las mezzosopranos Aigul Akhmetshina y Silvia Tro Santafé darán vida a Isabel. Oropesa, recientemente reconocida como la mejor cantante de ópera del mundo, se siente atraída por el papel de María, describiéndola como una mujer fuerte y orgullosa que no se deja vencer por las adversidades. “Es un papel que siempre he querido interpretar, ya que refleja la lucha y el sufrimiento de una mujer que tiene derecho a reclamar su lugar en la historia”, comenta Oropesa.
Escenografía y simbolismo
La escenografía de Maria Stuarda, diseñada por Hannah Postlethwaite, se inspira en un dibujo histórico de la ejecución de María Estuardo. Este diseño busca crear un ambiente opresivo y simbólico, donde los elementos visuales refuerzan la sensación de vigilancia y juicio. La escenografía se transforma en un patíbulo, un recordatorio constante del destino trágico que aguarda a la protagonista. Con esta producción, el Teatro Real no solo rinde homenaje a una obra maestra del repertorio operístico, sino que también invita al público a reflexionar sobre las lecciones de la historia y su relevancia en el presente.
