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Este sábado, Bilbao se convirtió en el epicentro de la reivindicación soberanista, con miles de simpatizantes de EH Bildu marchando por las calles de la capital vizcaína. Bajo el lema «Nazioa Gara» (Somos Nación), la formación abertzale ha convocado una manifestación que busca dar un paso adelante en la lucha por un nuevo estatus para Euskal Herria.
La marcha, que recorrió aproximadamente 700 metros entre las plazas de La Casilla y Zabalburu, estuvo marcada por un ambiente de unidad y determinación.
El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, fue el encargado de cerrar el acto con un discurso que resonó entre los asistentes.
Otegi enfatizó la necesidad de que «todo el mundo reconozca que Euskal Herria es una nación» y subrayó que el camino hacia el nuevo estatus comienza con el respeto a esta identidad. Además, instó a sus bases a luchar diariamente contra el neoliberalismo y a construir una sociedad alternativa, destacando que «no se puede liberar un país si no se prioriza lo colectivo sobre lo individual».
Durante su intervención, Otegi también hizo hincapié en los logros alcanzados por EH Bildu en el último año, incluyendo cambios legales significativos como el reconocimiento de las penas cumplidas por los presos de ETA en Francia. Asimismo, mencionó la importancia de los acuerdos logrados en Navarra, como la moción de censura que llevó a Joseba Asirón a la Alcaldía de Pamplona. Estos avances, según Otegi, son prueba del trabajo constante y comprometido de la coalición en pro de la soberanía vasca.
Uno de los momentos más emotivos de la manifestación fue la referencia de Otegi al acuerdo reciente para transformar el Monumento a los Caídos de Pamplona en un centro que honrará la memoria de Maravillas Lamberto, una niña asesinada en 1936. Otegi describió este cambio como «justicia poética», señalando que aquellos que glorificaban el pasado fascista ahora deben enfrentar la memoria de las víctimas. Este acto simbólico resuena profundamente en la lucha por la memoria histórica y la justicia en Euskal Herria.
La manifestación no solo reunió a simpatizantes de EH Bildu, sino también a representantes de otras formaciones soberanistas de izquierda, como ERC, BNG, CUP y Compromís. La presencia de estos líderes políticos subraya la importancia de la unidad en la lucha por un futuro soberano para Euskal Herria. La colaboración entre diferentes grupos políticos es vista como un paso crucial para avanzar en la agenda soberanista y alcanzar los objetivos comunes.
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