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El World Press Photo ha llegado a su vigésimo aniversario en Barcelona, consolidándose como un referente en el ámbito del fotoperiodismo. Cada año, más de un millón de visitantes se acercan al Centre de Cultura Contemporània (CCCB) para apreciar una selección de las mejores fotografías que capturan la esencia de los acontecimientos más relevantes a nivel mundial.
En esta edición, se presentan 129 imágenes que abordan temas de gran actualidad, como las migraciones, el cambio climático y los conflictos bélicos.
El comisario de la exposición, Carlos Vela, enfatiza la importancia de ir más allá de la mera visualización de las imágenes.
«Queremos estimular la reflexión del público, que se hagan preguntas y que se emocionen», afirma. Una de las fotografías más impactantes es la premiada como Fotografía del Año, capturada por el fotógrafo palestino Mohammed Salem. Esta conmovedora imagen muestra a una mujer palestina abrazando el cuerpo de su sobrina, víctima de un bombardeo en Gaza, y refleja las devastadoras consecuencias del conflicto bélico en la región.
La exposición también destaca el trabajo del fotógrafo Jaime Rojo, quien recibió el premio en la categoría de Reportaje Gráfico por su investigación sobre los esfuerzos para salvar a las mariposas monarca en América del Norte. Este tipo de trabajos subraya la capacidad del fotoperiodismo para abordar problemáticas ambientales y sociales de manera profunda y conmovedora. Según Marta Echevarría, comisaria de WPP, este año se examinaron más de 61,000 imágenes de 3,000 fotógrafos de 130 países, revelando temáticas que se presentan como urgentes, especialmente el cambio climático.
En un contexto donde la información se encuentra en constante disputa, el World Press Photo se erige como un defensor del fotoperiodismo. Echevarría advierte que este ha sido el año más peligroso para los periodistas desde la creación de la fundación, con más de mil profesionales muertos en dos décadas. «Es fundamental que el fotoperiodismo sea libre», señala Vela, quien también ha introducido una instalación en homenaje a la libertad de prensa y a los periodistas caídos. Esta reflexión es crucial en un momento donde la veracidad de la información se ve amenazada por la proliferación de noticias falsas.
La exposición del World Press Photo no solo busca mostrar imágenes impactantes, sino también generar un espacio de reflexión sobre la realidad que enfrentamos. Con una media de 60,000 visitantes anuales, el evento se ha convertido en un éxito rotundo, atrayendo a personas que desean conocer la actualidad global y reflexionar sobre su impacto en la sociedad.
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