Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, ha comentado este miércoles que la empresa aún no ha incluido en sus proyecciones para los próximos años la posibilidad de que el Gobierno español establezca de forma permanente el impuesto sobre la energía.
Según él, «no se ha aprobado absolutamente nada». Las estimaciones de la compañía se basan en hechos tangibles y, por el momento, solo hay especulaciones. Durante la presentación de los resultados hasta septiembre, que reflejan una ganancia de 5.471 millones de euros, un incremento del 50% gracias a las plusvalías de activos vendidos en México, Sánchez Galán añadió que la firma española integrará el impacto de este gravamen, que se concibió como temporal y excepcional, «en cuanto se implemente».
No obstante, el presidente de Iberdrola subrayó que «no está claro que esto vaya a suceder» y se mostró calmado al señalar que observarán los acontecimientos en un proceso que anticipa «muy largo y lleno de incertidumbres» en el Congreso y el Senado.
Por otro lado, esta mañana, Íñigo Errejón, portavoz de Sumar en el Congreso, indicó que «no existen avances» en las conversaciones con el PSOE para establecer de forma permanente el impuesto a las energéticas y al sector bancario. Asimismo, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, afirmó que está trabajando para que estos impuestos se conviertan en permanentes, señalando que no han impedido que en 2023 España se posicione como líder mundial en inversiones en energías renovables ni que ambos sectores logren resultados récord.
La redacción vigente de este impuesto, que afecta la actividad no regulada de las grandes empresas energéticas en España con un tipo impositivo del 1,2 %, ha sido impugnada por varias compañías del sector, como Iberdrola, ante los jueces, quienes aún no han emitido un fallo al respecto.