Diego Pérez de los Cobos, coronel de la Guardia Civil y líder de la comandancia de Madrid, ha expresado su descontento ante la reciente modificación legislativa que permite a los reclusos de ETA obtener la libertad anticipada. Durante un desayuno informativo, afirmó: «No sé qué es más doloroso, si los mimos a los malos o los desprecios a los buenos».
Este oficial estuvo presente en un evento junto a Maite Araluce, presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), organizado por Nueva Economía Fórum en la capital. Pérez de los Cobos, quien se retirará en diciembre, instó a facilitar el regreso de aquellos ciudadanos que fueron «expulsados» del País Vasco y Navarra debido a la violencia de la banda terrorista ETA.
Mencionó el «éxodo de cientos de miles de vascos y navarros que dejaron su hogar» por la amenaza de atentados. Con una trayectoria en la lucha contra el terrorismo, aseguró que, «ahora que los atentados han cesado», los gobiernos de estas comunidades «buscarán reparar esta grave situación promoviendo su retorno». En cuanto a la presidenta de la AVT, Maite Araluce, expresó su temor de que el siguiente movimiento del Gobierno, en su alianza con EH Bildu, sea eliminar del Código Penal el límite de 40 años de prisión para los miembros de ETA. Araluce advirtió: «Lo van a hacer y será pronto», destacando que las demandas históricas de los etarras están siendo atendidas.
Según Araluce, el propósito de la estrategia elaborada por el líder de la formación abertzale, Arnaldo Otegi, es evidente: «Aspira a que los 200 presos que considera de su grupo puedan ser liberados, y para ello están dispuestos a votar lo necesario». En este contexto, la presidenta de la AVT, que representa a 4,800 víctimas del terrorismo, principalmente de ETA, ha señalado que la primera etapa consistió en el acercamiento de los etarras tras la llegada de Pedro Sánchez al poder. «Marlaska nos aseguró que, como máximo, serían unos veinte y que nunca se llevarían a cabo en cárceles del País Vasco y Navarra. Esa fue la primera ocasión en que nos engañó de forma directa», comentó Araluce. Además, ha explicado que la segunda fase del plan de Bildu implica la transferencia de las competencias en materia penitenciaria a Euskadi, lo que les está facilitando la obtención de terceros grados «sin que se muestren arrepentidos ni colaboren con la Justicia».
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