En febrero de 2019, el entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, viajó a México, un evento que marcó el inicio del ‘caso Koldo’ según los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Sin embargo, la investigación del teléfono de Víctor de Aldama, uno de los principales involucrados y empresario, ha mostrado que las actividades relacionadas comenzaron mucho antes.
Las acciones de De Aldama para coordinar un encuentro entre el ministro y un legislador mexicano, además de su rol como consejero en Globalia (la empresa madre de Air Europa), se iniciaron apenas tres meses después de que Ábalos asumiera su puesto.
El 10 de septiembre de 2018, el empresario, quien fue enviado a prisión provisional recientemente, mantuvo una serie de conversaciones por Whatsapp con Pedro Haces, un empresario, político taurino y líder sindical en México. Su objetivo era asegurar una reunión en territorio español. En uno de los mensajes, Aldama escribió: «Hermano, tengo mucho preparado aquí y con el nuevo gobierno, podemos hacer grandes cosas…».
En ese entonces, él ejercía como cónsul honorario de España en México y buscaba establecer un encuentro que tratara temas de transporte entre España y México. Este evento contaría con la participación de Ábalos, el gobernador de Oaxaca, Pedro Murat, y Haces, con la intención de incrementar la frecuencia de vuelos de Globalia en esa nación. Aldama también indicó: «Ya he convencido al ministro para la línea directa Madrid-Oaxaca con Air Europa».
Cinco meses más tarde, se concretó el viaje. Inicialmente, la intención era realizarlo en España, pero finalmente se optó por cruzar el océano. Ábalos estuvo acompañado por su exasesor, Koldo García, quien también enfrenta cargos en el caso. La Unidad Central Operativa (UCO) había subrayado en informes previos la relevancia de este viaje, ya que representó el primer acercamiento entre este trío, del que más adelante emanarían las conexiones relacionadas con las mascarillas que llegarían un año después, durante la pandemia. Sin embargo, el lazo ya había comenzado antes.
El exministro declaró falsamente que su primer encuentro con De Aldama fue en una reunión en Oaxaca al surgir el caso. Las pruebas presentadas por la UCO indican que no solo lo conocía desde mucho antes, sino que la cita en este viaje no se produjo por casualidad. «Debo contarte que hay muchas y buenas cosas», alertó Aldama a su contacto en el país norteamericano. «Tengo todo organizado con el ministro de fomento», comentó.
El informe más reciente presentado ante el juzgado central de instrucción número 2 de la Audiencia Nacional especifica que se conocieron el 31 de agosto de 2018. Según ha reportado este medio, esto sucedió solo dos meses después de la llegada de Sánchez a La Moncloa. Ese día, Rubén de Aldama, hermano de Víctor y escolta de Ábalos, mencionó a su hermano que le había parecido «muy profesional», lo que lo llevó a presagiar que realizarían «cosas importantes». Estas palabras evidencian que el encuentro era reciente.
Rubén le comentó a su hermano que tenía una gran oportunidad para realizar ciertos movimientos y le envió el contacto de Koldo. Esta interacción se revela en una captura de pantalla de las conversaciones analizadas en el informe de la UCO. A partir de dicha charla, se deduce que ese día tuvo lugar un encuentro entre Koldo, Ábalos y Aldama. Este hecho se confirma, ya que el mismo día Aldama mencionó a un tercero, el mexicano Haces, sobre la falta de información respecto al ministro de Fomento, expresando: “Podemos hacer muchas cosas, esta mañana estuve nuevamente con ellos”, como se detalla en el documento.
En cuanto a Venezuela y Duro Felguera, los investigadores detectan vínculos con otros países de América Latina donde Aldama tenía influencia gracias a su conexión con el Ministerio, especialmente en la República Dominicana y Venezuela. «Aldama desempeñaría funciones de mediación internacional», especifican. Entre sus actividades, se incluía la gestión de una deuda de 200 millones de dólares que Venezuela contrajo entre 2012 y 2013 con la aerolínea española Air Europa. «A partir del análisis de las pruebas digitales encontradas en la casa de Aldama, se ha podido comprobar que el 30 de noviembre de 2018, el Gobierno venezolano envió una carta a esta empresa para seguir negociando dicha deuda».
El ex presidente del club de fútbol Zamora mantenía comunicación directa con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, según lo evidenciado en su teléfono móvil. De hecho, la labor de la UCO ha marcado un hito en la comprensión de la visita de la representante venezolana a España en enero de 2020.
Más allá del papel crucial que desempeñó De Aldama en el rescate de Air Europa, según señala la Guardia Civil, el acusado también estaba al tanto del apoyo que la SEPI proporcionó a otra empresa vinculada con Venezuela, la compañía energética Duro Felguera. En un informe se menciona que el 3 de diciembre de 2020, Aldama envió un mensaje a José María Orihuela, el director ejecutivo de Duro Felguera, incluyendo un enlace de una noticia sobre el rescate de la empresa. «Felicidades. Me invitarás a una caña», fue su comentario.
Orihuela le respondió: «Aún no. Ha sido una falsa alarma». La ayuda económica del Gobierno hacia la empresa energética se materializó posteriormente, ya en 2021. Sin embargo, finalmente ocurrió.
Respecto a Chirino
La UCO describe las conexiones «de alto nivel» del intermediario y detalla cómo intentó conseguir que el chalet que la trama pagó a Ábalos en Cádiz se obtuviera inicialmente por medio de un grupo de venezolanos. Entre ellos se encontraba un empresario con el apellido Chirino, relacionado con el negocio de la venta de oro. En el itinerario que Aldama organizó para la visita de Delcy Rodríguez a España, se programó una reunión con este empresario en Madrid.