La contienda continúa sin disminuciones y sin señales de resolución hasta que se celebren las votaciones en el futuro. Luis Tudanca, líder del PSOE en Castilla y León desde hace una década, no tiene intención de rendirse. Su confrontación con Ferraz, la dirección de Pedro Sánchez, se mantiene activa tras la suspensión de las primarias exprés, que buscaban facilitar su reelección.
Su equipo señala directamente al secretario de Organización, Santos Cerdán, acusado de «jugar sucio» en esta disputa. Mientras tanto, la dirección nacional procura calmar la situación y evitar un aumento del conflicto. Lo que se asegura es que las primarias serán reprogramadas «pronto», pero solo tras el 41º Congreso, que se llevará a cabo en Sevilla del 29 de noviembre al 1 de diciembre.
En este primer lunes de octubre, el ambiente se tornó más tenso en el seno del PSOE. Tudanca pasó al ataque después de un par de días de silencio, acompañado por el alcalde de León, José Antonio Diez, quien también dirige el partido en la ciudad. Tudanca compartió en El País una descripción dolorosa de su ruptura con Sánchez, afirmando que intentó establecer diálogo con el presidente acerca del proceso interno hace «casi un mes». La respuesta del aparato federal llegó el pasado viernes, cuando se detuvieron las primarias, que el día anterior habían sido aprobadas por el comité autonómico del PSOE en Castilla y León con 105 votos favorable, 14 en contra y 11 abstenciones.
Tudanca enfatiza que su intención no es enfrentar a Sánchez, sino abogar por un proyecto «autónomo» y dejar el partido «preparado» ante un posible adelanto de las elecciones.
El calendario propuesto por Tudanca ha sido detenido por la comisión federal de ética y garantías. Se había planeado que hoy, 8 de octubre, comenzara el proceso electoral. En el caso de que se presentaran varios aspirantes a la secretaría general, los miembros votarían en la primera vuelta el 9 de noviembre, y si fuera necesario, habría una segunda vuelta una semana después. De este modo, el PSOE de Castilla y León tendría su líder definido antes del 41º Congreso Federal. Sin embargo, el órgano judicial del partido decidió suspender este cronograma, argumentando que todo lo relacionado con el proceso congresual, no solo el congreso autonómico fijado para el 25 y 26 de enero de 2025, debe iniciarse después del congreso de Sevilla.
Tudanca señala que su intención no es desafiar a Sánchez, sino abogar desde Castilla y León por un proyecto independiente. Además, considera que es su responsabilidad dejar al partido listo ante la posibilidad de unas elecciones autonómicas anticipadas, especialmente tras la salida de Vox del gobierno regional de Alfonso Fernández Mañueco. El líder socialista expresa su malestar por las filtraciones y nombres que se han estado difundiendo desde el entorno de la secretaría de Organización, bajo la dirección de Santos Cerdán, lo que, según él, ha creado confusión y desestabilización en la federación. Aunque se muestra leal al presidente del Gobierno, aclara que «la lealtad no implica sumisión» y que «la unidad no es sinónimo de uniformidad».
El dirigente regional no dirigió sus críticas específicamente hacia Cerdán, sino hacia su «círculo cercano». En este grupo, como señalan desde la dirección autonómica, se encuentran el secretario provincial de León, Javier Alfonso Cendón; el secretario federal de Acción Electoral y Formación, Javier Izquierdo, senador por Valladolid; y Manuel Arribas, diputado por Ávila. No obstante, el alcalde de León, en una conversación con Onda Cero, responsabilizó directamente a Cerdán por interpretar «de manera retorcida» los estatutos federales del partido. Recordó que en 2021 Tudanca fue designado secretario general del PSOE en Castilla y León un mes antes del 40º Congreso Federal en Valencia, sin inconvenientes. La justificación de la comisión de garantías es que cada congreso tiene sus propias normas. Para José Antonio Diez, la situación representa una actitud de «juego sucio» por parte del líder del aparato federal, quien está siendo instado por Sánchez a renunciar debido al «perjuicio» causado al PSOE en general.
Habrá un nuevo calendario que se ajustará a lo indicado por la comisión de garantías y lo aceptado en el comité federal. Ferraz asegura que «los militantes de Castilla y León no serán despojados de su derecho a votar».
La dirección de Sánchez tomó precauciones el lunes para no agravar la situación, aunque reafirmó su postura. Fuentes de Ferraz informaron que «pronto habrá un calendario de primarias para Castilla y León», pero «en conformidad con lo establecido por la comisión [federal] de ética y garantías y el calendario aprobado en el comité federal [el 7 de septiembre pasado]». «No se negará a los militantes de Castilla y León su derecho a votar».
«No queremos involucrarnos en disputas».
El comité central de los socialistas respondió a las declaraciones de Tudanca, quien les acusó de «silenciar la voz de la militancia». Aseguraron que van a reactivar las primarias, aunque sin dar detalles específicos y limitándose a mencionar lo evidente: estas tendrán lugar tras el 41º Congreso, que se llevará a cabo a partir del 2 de diciembre. Ambas facciones, tanto los tudanquistas como sus opositores, dan por hecho que habrá contienda entre Tudanca —quien aún no ha validado su candidatura— y un candidato que será apoyado por la dirección federal. Entre los nombres que se mencionan están Javier Izquierdo, la ministra Ana Redondo y Carlos Martínez, actual alcalde de Soria desde 2007, quien logró una ansiada mayoría absoluta en su ciudad en 2023 por cuarta vez consecutiva.
La ministra Ana Redondo comentó que «es fundamental aceptar los estatutos y las reglas del juego con naturalidad», y agregó que lo «más sensato» es que primero se realice el congreso federal y posteriormente se definan los liderazgos a nivel regional.
Las fuentes de Ferraz y del Ejecutivo se abstuvieron de dar una respuesta clara ante Tudanca o Diez. Según personas de alto nivel consultadas por este medio, la postura fue de «sin comentarios» y «no queremos entrar en polémicas». Sin embargo, manifestaron su conformidad con las opiniones expuestas en un blog por el periodista Pedro Vicente, quien señala que el líder autonómico parece estar en una «huida hacia adelante», priorizando sus propios intereses frente a los de su partido. Además, sugirió que debería presentar su «dimisión irrevocable», describiéndolo como un «político que ha sido rechazado por su propio partido, un zombi totalmente incapacitado para desempeñar su papel como jefe de la oposición» ante Fernández Mañueco. Los detractores de Tudanca argumentan que no debería continuar en su posición ni presentarse una cuarta vez como candidato, considerando sus intentos infructuosos en 2015, 2019 —cuando ganó, pero no pudo gobernar debido al apoyo de Ciudadanos a Mañueco— y 2022.
Las manifestaciones públicas de los allegados a Sánchez se limitaron a enfatizar la importancia de respetar las «reglas del juego», las cuales deben ser uniformes «para todos» y deben ser «cumplidas», como explicó Ana Redondo, ministra de Igualdad. Ella indicó que lo más apropiado sería celebrar primero el congreso federal, lo que permitiría resolver las cuestiones de liderazgo, antes de proceder a los congresos autonómicos, y posteriormente a los provinciales y locales. La ministra añadió que es necesario asumir los estatutos y las normas del partido con normalidad. Por su parte, Juan Espadas, portavoz del PSOE en el Senado y secretario general del PSOE andaluz, afirmó que el tema está «salvado» y que lo ocurrido constituye una «interpretación distinta de los estatutos» que llevó a la comisión de garantías a pronunciarse y tomar una decisión al respecto.
El alcalde de Soria adoptó una postura claramente reservada hacia Tudanca, a quien algunos en la federación consideran un posible rival interno. Martínez subrayó la importancia de «reducir el estruendo de las polémicas», algo que considera habitual en los procesos internos, para así fomentar «la unidad del partido como principio fundamental», según informa EFE. Para él, las primarias deberían llevarse a cabo «en el momento adecuado y con la máxima seguridad».
El regidor defiende la idea de «reducir el estruendo», mientras que el diputado Manuel Arribas opina que el ciclo de Tudanca ha terminado, y otros perciben en él un «alto grado de desesperación».
El diputado de Ávila, Manuel Arribas, fue el más contundente en sus críticas a Tudanca. En el Diario de Ávila, expresó su apoyo «sin reservas» a la dirección federal y a Cerdán. Según su perspectiva, la decisión del barón autonómico de adelantar las primarias es «una maniobra desesperada», ya que «su tiempo en el cargo está llegando a su fin». Considera que «su periodo ha terminado».
Los detractores de Tudanca notan «mucha desesperación» en su actitud, señalando que sus afirmaciones en El País son «inapropiadas». Un importante dirigente provincial indica que «es una táctica muy poco inteligente, y la respuesta de quienes lo respaldan es bastante limitada. Solo su círculo cercano».
«No vamos a permitir que cuatro personas en Madrid tomen decisiones por nosotros».
Los seguidores del barón autonómico sostienen que la oposición en su contra es reducida. «Hasta hace menos de un año no había ningún conflicto interno. Todo este enredo proviene de una situación en León», que alberga el mayor número de afiliados, el doble que Valladolid, «y que tiene repercusión en toda la región», comenta un alto dirigente provincial. Según fuentes cercanas a Tudanca, este estaba dispuesto a dar un paso al lado —de hecho, durante la noche electoral de las últimas elecciones autonómicas en 2022, insinuó que se retiraría, aunque luego cambió de opinión—, y buscó dialogar con Sánchez sobre su situación presente y futura, pero el presidente no tuvo tiempo para él, algo que él mismo lamentó en una entrevista con un medio del grupo Prisa, haciendo una confesión poco habitual. «Luis siempre está dispuesto a colaborar, está brindando un servicio al partido, pero no permitiremos que cuatro personas desde Madrid, que dejaron al PSOE de Castilla y León en ruinas, tomen decisiones por nosotros», advierten los miembros de su equipo.
Tudanca y su equipo se han sentido molestos por la filtración de varios nombres y por las maniobras para desestabilizarlo, sin que Ferraz interviniera: «Se ha abierto un debate que previamente no existía en la federación».
Tudanca expresó su descontento por el cambio en las listas para las elecciones generales del 23 de julio de 2023. Arribas, a pesar de la oposición tanto suya como de la dirección en Ávila, fue reposicionado por Ferraz. La frustración de Tudanca aumentó a medida que surgían nuevos posibles contendientes, mientras que la dirección federal no intervenía para frenar estas situaciones. Él y su equipo percibieron esto como una ofensa, especialmente alimentada por los medios regionales afines a José Luis Ulibarri, quien ha sido condenado por el caso Gürtel. Sin embargo, las estrategias en su contra solo han servido para solidificar su posición. Según un secretario provincial, «Si Ferraz no confiaba en Luis, podría haberle pedido que se marchara. Pero se han filtrado nombres y se ha creado un debate que antes no existía en la federación, ya que no hay ninguna oposición al presidente. Las nueve provincias hemos actuado con sensatez».
Los lazos se han roto por completo y, aunque la tensión pueda disminuir hasta el 41º Congreso, el conflicto persistirá hasta las primarias. Los tudanquistas creen que Ferraz ha perdido el control de la situación, ya que solo ha logrado unir al partido en torno a su líder regional. «Será complicado retroceder», advierten. Además, en la cúpula regional desafían a sus opositores y a la dirección de Sánchez a proponer un candidato, convencidos de que la federación está «totalmente unida» con su líder.
Los allegados al líder regional subrayan que, a pesar de no haber gobernado en tres ocasiones, fue el único en ganar unas elecciones autonómicas, junto al expresidente Demetrio Madrid, y valoran su esfuerzo por recorrer la comunidad durante estos diez años.
Los seguidores de Tudanca reconocen, sin lugar a dudas, que ha sido candidato en tres ocasiones. Sin embargo, resaltan que él y Demetrio Madrid, quien fue presidente entre 1983 y 1986 hasta su dimisión tras un proceso judicial del que logró salir absuelto, son los únicos que han logrado «ganar unas autonómicas». Además, mencionan que Tudanca impulsó una moción de censura contra Mañueco en marzo de 2021 por indicación de Ferraz, actuando «por responsabilidad de partido», cuando la situación numérica era evidente. También subrayan que el secretario autonómico «ha recorrido» todo el territorio, el cual es extenso y complicado, con una inclinación muy conservadora. «¿Qué ministro aterriza en una comunidad tan vasta para unas elecciones que podrían ser en unos meses? Resulta incomprensible la postura de Ferraz hacia él, ya que Tudanca no ha tenido conflictos con Ferraz», comenta un secretario provincial.
La dirección de Sánchez asegura que las primarias se reprogramarán «pronto», pero más allá de la fecha, otro leal a Tudanca anticipa que el trayecto será «penoso», dada la creciente tensión interna hasta el momento en que se habiliten las urnas y los miembros, alrededor de 10.000 de la federación, puedan votar.
