Este martes, Pedro Sánchez ha expresado su preocupación por la situación en Oriente Próximo, a la que ha definido como «preocupante». Ha instado a las partes a mantener la calma, tras rechazar el ataque que Irán llevó a cabo contra Israel.
Durante una conversación telefónica con António Guterres, secretario general de la ONU, el presidente del Gobierno español se refirió a «la preocupante situación»: «España condena la agresión de Irán hacia Israel y hace un llamado para que cesen estos actos de violencia de inmediato», declaró Sánchez.
Además, enfatizó que «la paz solo puede lograrse mediante un alto el fuego en Gaza y Líbano, así como el respeto al derecho internacional y al derecho humanitario». Este martes, Irán realizó un ataque con numerosos misiles contra Israel, en el contexto de un aumento de las hostilidades en la región, lo que llevó a Estados Unidos a respaldar a Israel tras la decisión de Benjamin Netanyahu de iniciar una ofensiva terrestre en el sur de Líbano. En una nota similar, el Ministerio de Asuntos Exteriores emitió un comunicado enérgico condenando los bombardeos en Irán y pidiendo a la comunidad internacional una acción urgente para detener la «escalada regional con posibles consecuencias imprevisibles». Israel vivió el martes un segundo ataque significativo por parte de Irán en pocos meses, un bombardeo masivo que la Guardia Revolucionaria iraní justificó como represalia por el asesinato en julio del antiguo líder de Hamás, Ismail Haniye, y la muerte reciente del líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, en Beirut.