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Junqueras adopta una postura ofensiva y apunta a Rovira como el encargado de la batalla clandestina de ERC

Oriol Junqueras fundó la «estructura B» de ERC mientras cumplía condena en prisión, información que el mismo Junqueras confirmó durante una entrevista en RAC1. Afirmó que hasta hace poco, no sabía nada al respecto. Junqueras, quien fue presidente del partido hasta julio, indicó a Marta Rovira sin ningún intento de encubrimiento.

Rovira fue su mano derecha y lideró el partido durante una década. Junqueras, el ex presidente de ERC, anunció su candidatura este sábado para retomar el liderazgo del partido en el congreso que tendrá lugar el 30 de noviembre. Lanzó un fuerte ataque contra la cúpula actual del partido y abandonó definitivamente la estrategia cautelosa que había seguido en los últimos meses para ganar de nuevo el control del partido republicano.

Junqueras ha empezado a atacar, en vista de que el congreso está a solo dos meses de distancia.

Poco después, Rovira respondió mediante sus redes sociales. Ha utilizado su posición como secretaria general y encargada de la organización del congreso para protegerse de las acusaciones, aludiendo a su potencial para desvelar información una vez que concluya el congreso y, por lo tanto, su papel como líder del partido.

Según individuos cercanos a Rovira, la separación se produjo cuando ella rechazó la propuesta de Junqueras de volverse a postular juntos tras el severo revés electoral sufrido por Esquerra en las recientes elecciones regionales. El partido republicano experimentó un descenso drástico en su representación, pasando de 33 a 20 diputados en las elecciones adelantadas por el también republicano Pere Aragonès. Las fuentes cercanas a Junqueras sostienen que nunca avaló este adelanto electoral.

Rovira ha declarado en su cuenta de X, que no responderá a Oriol Junqueras hoy, debido a su responsabilidad. Ha agregado que, por el respeto que le merece el proyecto en común, esperará hasta que concluya su actual periodo como secretaria general. Sin embargo, también ha previsto que cuando termine su mandato, dará respuesta «por el país y la buena gente de Esquerra». No parece que la contienda interna en el partido republicano vaya a resolverse en el congreso, donde Junqueras parece ser el candidato más prometedor.

Junqueras mostró su fuerza

El sábado pasado, Junqueras demostró su poder en el evento que tuvo lugar en el Teatro de la Pasión de Olesa de Montserrat (Barcelona), un lugar emblemático que fue casi ocupado en su totalidad por los seguidores de Junqueras. Había 1.300 personas para expresar el soporte a su candidatura en una votación interna con un censo de poco más de 8.000 militantes, donde compiten cuatro candidatos.

Durante el evento, Junqueras criticó la formación del «grupo B» que tomaba decisiones políticas de manera no oficial, funcionando «no solo fuera de la presidencia del partido, sino también de la Ejecutiva Nacional y del Consejo Nacional». El lunes, el líder republicano reiteró que «no estaba al tanto» de la creación de este grupo, y ha culpado a Rovira por ello.

«Quien osó hacer esto, traicionó nuestros principios», declaró el sábado, citando como ejemplo un muñeco que imitaba a Junqueras colgado de un puente con un mensaje que decía: «púdrete en la cárcel», o el envío de mariachis a la sede de JxCat. Sin embargo, la campaña más polémica de la B de ERC fue la de los carteles que vinculaban a los hermanos Ernest y Pasqual Maragall con el Alzheimer.

El lunes, Junqueras desmentía cualquier relación con esa estructura y la campaña relacionada, insistiendo en que esta se creó mientras él estaba en prisión: «Se hizo principalmente para mantenernos en la ignorancia a mi, a la dirección ejecutiva y al consejo nacional», afirmó.

Durante la entrevista, Junqueras expresó su deseo de que Rovira tenga éxito, y mostró su «respeto, consideración y gratitud» hacia la que actualmente es la secretaria general del partido. «Quiero enfatizar que hay eventos que no deberían haber ocurrido», dijo Junqueras, refiriéndose a la «estructura B».

Junqueras busca retener su posición con su candidatura Militància Decidim, con Elisenda Alamany, la líder de ERC en Barcelona, en segunda posición. Otras tres candidaturas competirán por el liderazgo de ERC en el congreso de noviembre: Nova Esquerra Nacional, apoyada por Marta Rovira y con Xavier Godàs como candidato a la presidencia; Foc Nou, liderada por el ex consejero Alfred Bosch, y una cuarta lista, compuesta por miembros del Col·lectiu Primer d’Octubre, con la intención de agrupar a aquellos en contra del pacto de investidura de Salvador Illa.

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