Debido a la difusión de videos que incitan a cruzar el espigón del Tarajal en Ceuta a nado, la Guardia Civil ha encendido la alerta. Según lo indicó la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), gracias a un previo aviso, ya se han comenzado a desplazar refuerzos a esta ciudad.
Aunque la Delegación del Gobierno en Ceuta no ha confirmado la existencia de un despliegue extraordinario para el domingo 15 de septiembre, afirmó que los cuerpos de seguridad estarán listos para responder en caso de un incremento en la presión migratoria.
Fuentes consultadas confirmaron que los refuerzos de la Guardia Civil son tanto humanos como materiales. También se informó que este viernes llegó a la ciudad una patrullera.
Por otro lado, las autoridades de Marruecos, específicamente en Castillejos (Fnideq) – la ciudad más cercana a Ceuta – han intensificado la vigilancia y el control. Recientemente se han instalado decenas de vallas para restringir el acceso a la playa y se han arrestado a 60 personas en Tánger y Tetuán bajo sospechas de promover «noticias falsas» en las redes sociales propiciando la organización de migraciones ilegales masivas. Varias de estas publicaciones marcan el 15 de septiembre como el día crucial para lanzarse al mar.
De manera coincidente, este mismo día también fue seleccionado por el diputado nacional de Vox, Javier Ortega Smith, para su visita a Ceuta con el propósito de vivir en persona la presión migratoria. La información fue difundida por el partido este viernes.
El líder de Ceuta, Juan Vivas, ha solicitado calma a los habitantes de Ceuta ante el pánico provocado. «Ceuta es segura», declaró durante una entrevista en el programa ‘Despierta Andalucía’ de Canal Sur. «Somos una sociedad madura y poseemos total confianza en nuestras Fuerzas de Seguridad Nacional. Nos mantenemos optimistas de que la alarma actual no se materializará, aunque debemos reconocer que nuestra frontera sur —también la frontera de España y Europa en África— está perpetuamente inestable y requiere una intervención prioritaria y particular», ha declarado. Vivas ha reiterado que la problemática migratoria es «una responsabilidad nacional» y no debería recaer solamente en «una ciudad de apenas 18 km² con unas circunstancias para el desarrollo económico sin similares en el resto de España, exceptuando Melilla».
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Un examen de la inestabilidad política y sus implicaciones para el futuro del país