Los jugadores de fútbol Rafa Mir y Pablo Jara fueron liberados bajo medidas de precaución después de haber comparecido ante el juez al mediodía siguiente a ser acusados de agresión sexual por dos jóvenes, según fuentes familiarizadas con el fallo judicial.
Jaime Campaner, abogado de Mir, confirmó la liberación en una declaración a la prensa en el Juzgado de Instrucción número 8 de Llíria (Valencia). «Es libre, eso es lo principal», comentó el abogado. Ambos deportistas fueron detenidos tras las denuncias de las mujeres de haber sido agredidas en la residencia de Mir en la urbanización Torre En Conill (Bétera), a la que los cuatro llegaron en la madrugada del domingo luego de conocerse en una discoteca.
La mañana del domingo, una patrulla de la policía local de Bétera se presentó en la casa de Mir en respuesta a una llamada de un vecino. Las mujeres fueron llevadas a un hospital y luego presentaron una denuncia que resultó en la detención de ambos jugadores. Campaner reafirmó que, sin duda, el sexo entre su cliente y una de las mujeres fue consensuado. Mir se mantuvo firme en esta afirmación durante su declaración y fue liberado, siendo investigado por agresión sexual bajo medidas no especificadas aún. El jugador no asistió a la práctica del Valencia el martes por la mañana ya que permaneció en la comisaría en Patraix, Valencia, durante dos noches. Valencia emitió una declaración el martes reconociendo la detención, pero explicó que desconocía los «detalles» del caso y se puso a disposición de la justicia.
Mir, oriundo de Cartagena (Murcia) y de 27 años de edad, finalizó su etapa formativa en Valencia antes de ser transferido al Wolverhampton en el invierno de 2018. En 2021, se unió a las filas del Sevilla, con quien tiene un contrato vigente hasta junio de 2026. Este verano, se llegó a un trato para que Mir juegue la presente temporada a préstamo en el club Mestalla.