Pedro Sanchez, prime minister of Spain seen speaking during the ceremonial conference opening of the COP24 UN Climate Change Conference 2018.
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Pedro Sánchez ha anunciado la retirada definitiva de la embajadora de España en Argentina, María Jesús Alonso. El presidente español ya anunció que la respuesta del país sería dura.
Con esta drástica decisión de parar a la embajadora en Buenos Aires, el Gobierno continúa en su modus operandi tras las declaraciones de Milei. Este calificó de «corrupta» a Gómez. Por su parte, el ministro de Exteriores Albares anunció la llamada a consultas de María Jesús Alonso, convocando el 21 de mayo en Exteriores al embajador argentino, Roberto Bosch.
Todo ello con la intención de exigir una disculpa pública de Milei, quien en las últimas horas se ha mostrado claro descartado que vaya a ocurrir.
La crisis diplomática ha subido con intensidad hasta llegar a una situación inédita en Europa. Todo ello regado con un cruce de declaraciones que más pertenecen a otros ámbitos que a la política. Por un insulto, por una declaración, nuestro Gobierno retira a la embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso. Ese anuncio implica que la legación diplomática tenga a partir de ahora como máximo representante a su encargado de negocios. El Gobierno no descarta adoptar más en función de la evolución de los acontecimientos, aunque no desvela cuáles podrían ser esas acciones.
«Es un disparate propio de un socialista arrogante (…) los socialistas son capaces de hacer cualquier cosa». «Esto mancha la imagen internacional de España y lo arrogantes que son como creerse que son el Estado y que nadie puede decirles nada», ha declarado Milei, quien ha negado que Argentina vaya a tomar alguna medida similar.
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Un examen de la inestabilidad política y sus implicaciones para el futuro del país