Muere este miércoles 4 de enero Nicolás Redondo, un histórico del sindicalismo en España. Así han lamentado su fallecimiento los dirigentes.
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Muere Nicolás Redondo, el que fuera líder de la UGT. El Secretario General de la UGT y uno de los primeros concejales del en Vizcaya ha fallecido a los 95 años.
Muere Nicolás Redondo, el que fuera líder de la UGT
Nicolás Redondo era un histórico del sindicalismo en España. También uno de los primeros conejales del PSOE en Vizcaya. Finalmente ha perdido la vida en Madrid este miércoles 4 de enero a los 95 años. De esta forma lo ha comunicado el sindicato UGT en un comunicado publicado en su página web en el que comunican el fallecimiento.
Lo tachan como una “figura clave en las conquistas de las libertades sindicales y políticas, así como en la consecución de derechos laborales y sociales de nuestro país”.
“Una figura clave en la historia de nuestra democracia”
El actual Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, también ha comentado la muerte de Nicolás Redondo. Lamenta su pérdida “con gran pesar y dolor” y manifiesta su despedida de un “hombre comprometido, valiente y coherente”. Este, explica, era una clave en el “antifranquismo, la transición y la democracia”. Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también ha compartido un mensaje en su perfil de Twitter. En él ha reconocido que Redondo fue “una figura clave en la historia de nuestra democracia”. “Un ejemplo de lucha comprometida por el avance de los derechos de los trabajadores y de nuestro estado del bienestar. Todo mi cariño a su familia, amigos y compañeros y compañeras”, ha explicado.
Tras la Guerra Civil lo condenaron a muerte
“Adiós a Nicolás Redondo. Deja atrás una vida consagrada a la defensa de las personas trabajadoras, las libertades y la democracia. Se va un sindicalista extraordinario al que este país le estará siempre agradecido”, escribía en su cuenta de Twitter la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Trabajador de los Altos Hornos, ya era militante del PSOE y de UGT en 1915. Tras la Guerra Civil lo condenaron a muerte. Sin embargo, le conmutaron la pena por 30 años de cárcel, de los que cumplió seis en El Puerto de Santa María (Cádiz).