La Ley Trans vuelve a abrir una brecha en el seno del Gobierno con diferencias claras entre las feministas del PSOE y de Unidas Podemos.
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El PSOE quiere enmendar la Ley Trans para proteger a los menores. Feministas socialistas no ven con buenos ojos varios apartados de la nueva ley propuesta por Unidas Podemos.
El PSOE valora enmendar la Ley Trans para cuidar a los menores
La ley trans sufre un bloqueo en el Congreso de los Diputados que podría terminar si las feministas del PSOE así lo deciden. No repetir la jugada de la semana pasada sería la clave del desbloqueo. Entonces pidieron una nueva petición de ampliación del plazo de enmiendas.
De esta forma lo confirman fuentes del Grupo Socialista. Explican que aunque el partido terminará de fijar su posición este martes 25 de octubre y puede haber cambios. Lo «probable» es que no vuelvan a retrasar la tramitación parlamentaria del articulado y presenten sus propuestas. Estas en ningún caso pasarán por modificar el punto nuclear de la ley: la autodeterminación de género. Centrarán así su debate en la diferenciación de trato a las víctimas de violencia de género e intragénero.
Las diferencias entre las feministas del Gobierno
La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo es una de las voces socialistas más críticas con la ley. Calvo aseguró en una conferencia en la Universidad de Zaragoza que lo que quiere su partido es que la norma sea «rigurosa, garantista y constitucional». Cree que cuando la ley la aprueben, pasará por el Tribunal Constitucional porque será recurrida por «las derechas». Por ello su intención es que «cuando ocurra y llegue una sentencia», el tribunal no le diga «nunca» al PSOE «que no ha sabido interpretar correctamente la Constitución en una materia tan delicada».
¿Cuál es el futuro de la ley?
Aplazar por quinta la tramitación de la ley trans reabre las diferencias entre los socios de Gobierno. El motor actual del electorado de los de Unidas Podemos podría frenar su actividad. Ya acusaron al PSOE de retrasar la norma con la intención de bloquear su tramitación. Para ellos, unirse al PP para prorrogar una semana más el plazo de enmiendas reflejaba una voluntad de los socialistas de forzar que una de las leyes estrella del Ministerio de Igualdad terminara por no salir esta legislatura.