El Consejo de Ministros aprueba este lunes 1 de agosto la ley por el bienestar animal, norma pionera que pondrá fin al maltrato y al abandono.
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La ley de bienestar animal ya es una realidad. El Consejo de Ministros aprueba este lunes, 1 de agosto, en segunda vuelta la Ley de Derechos Animales. Esta es una norma pionera que pondrá fin al maltrato, al abandono y al sacrificio.
La ley de bienestar animal ya es una realidad
El Consejo de Ministros del Gobierno de coalición aprobó en febrero el anteproyecto de Ley de Protección Animal. Lo redactó la Dirección General de Derechos de los Animales, que dirige Sergio García Torres, del Ministerio de Derechos Sociales, que dirige Ione Belarra.
Esta quiere eliminar el maltrato, el sacrificio y el abandono. Además, la ley incorpora la violencia instrumental como agravante. Ahora, el Consejo de Ministros aprobará en segunda vuelta la Ley de Derechos Animales.
Claves de la ley de bienestar animal
“El principal objetivo de esta Ley no es tanto el garantizar el bienestar de los animales evaluando las condiciones que se le ofrecen, sino el regular el reconocimiento y la protección de la dignidad de los animales por parte de la sociedad. Por tanto, no regula a los animales como un elemento más dentro de nuestra actividad económica a los que se deban unas condiciones por su capacidad sentir, sino que regula nuestro comportamiento hacia ellos como seres vivos dentro de nuestro entorno de convivencia”.
Perros peligrosos y cría incontrolada
Evitarán la reproducción incontrolada. De esta forma la cría sólo podrán realizarla criadores autorizados. Además, imponen la identificación y vacunación obligatorias en todo el territorio estatal y la necesidad de formación para la tenencia responsable de animales. También obliga a los propietarios de animales de compañía que permanezcan en espacios abiertos o puedan relacionarse con otros animales de la misma especie y distinto sexo a esterilizar a sus animales. Todo ello para evitar las camadas indeseadas, que generan maltrato y abandono, y la cría no profesional.
En cuanto a los conocidos como “perros peligrosos”, todos ellos deberán cumplir los criterios de clasificación por sociabilidad, determinados reglamentariamente. “La tenencia de animales de compañía debe llevar aparejada una responsabilidad a la altura del cuidado que se debe dar a un ser diferente a una cosa”.