Temas cubiertos
El Gobierno prepara un plan ante el riesgo de corte del gas ruso. Sánchez tiene varios encuentros con las patronales de petroleras, gasistas y eléctricas y con las grandes industrias en busca de propuestas para recortar el consumo.
La Unión Europea ve factible la amenaza de Putin y temen que dé un paso más y aplique un corte total de suministro de gas a los estados miembros. Esta sería una nueva medida de presión en pleno choque por la invasión de Ucrania.
La tensión aumenta por el miedo a que Rusia aproveche la parada técnica de 10 días para labores de mantenimiento en el gran gasoducto Nord Stream I. Este arrancó este lunes, 11 de julio. La Comisión Europea prepara un plan de contingencia con medidas específicas para hacer frente a un recorte de la llegada de gas ruso que presentará la próxima semana. Esperan mientras conocer las propuestas de Bruselas, pero el Gobierno español ya maniobra rearmar un paquete de medidas propio para afrontar una situación de emergencia por falta de suministro energético en Europa.
El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya advirtió explícitamente en el Debate sobre el Estado de la Nación del riesgo de que Vladimir Putin utilice como “otra arma de guerra” un corte de suministro de gas hacia Europa y de las enormes consecuencias económicas que tendría. Gazprom no garantiza el suministro del gasoducto Nord Stream tras una parada técnica.
De hecho, es el propio sector energético quien subraya que para España no hay riesgo de seguridad de suministro por baja dependencia del gas ruso. Tampoco por la diversificación de los países de origen de las importaciones. Lo cierto es que tanto el Ejecutivo como grandes grupos energéticos alertan del golpe que supondría para la economía española un corte del gas ruso a través de una nueva espiral de subida de los precios energéticos.
La reciente transacción de SDLE marca un nuevo rumbo en el sector de defensa en España.