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Pedro Sánchez viaja a Marruecos sin el respaldo del Congreso. Se reúne este jueves 7 de abril con Mohamed VI, mientras sus socios le exigen que rectifique el giro con el Sáhara.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, emprende este jueves 7 de abril un viaje a Marruecos, cuatro años después de su última reunión con Mohamed VI. Lo hará para recoser la relación entre ambos países, muy deteriorada en los últimos tiempos.
En pleno Ramadán, el jefe del Ejecutivo español hablará esta tarde con el rey. Este le ha invitado, además, a participar de la cena, el iftar, con la que rompen el ayuno que mantienen durante todo el día. Un gesto importante que simboliza una «amistad muy fuerte». Demuestra el compromiso de Rabat en la reanudación plena de relaciones diplomáticas. El objetivo de la reunión es poner en marcha la hoja de ruta que consolida la nueva relación, «una hoja de ruta ambiciosa, a la altura de dos países vecinos y socios estratégicos». Así lo destacan desde el Gobierno español.
Esta reunión tendrá el fin de la reanudación de las conexiones marítimas entre España y Marruecos, así como con el restablecimiento de la Operación Paso del Estrecho. Esta, en los dos últimos años ha estado interrumpida. Obligaba a los marroquíes residentes en el extranjero a realizar el viaje de vacaciones a su país a través de Francia e Italia. Asimismo, estudiarán la reapertura de las fronteras de Ceuta y Melilla, asunto que está pendiente de la evolución de la Covid. Esperan fijar una fecha para la Reunión de Alto Nivel pendiente desde hace dos años.
La invitación a visitar Rabat tuvo lugar la semana pasada en el marco de una conversación entre Sánchez y Mohamed VI. La iniciativa fue del rey marroquí. Esto supone el primer contacto desde que restablecieron las relaciones, a consecuencia del giro español, abandonando su tradicional neutralidad sobre la autonomía del Sáhara. Apoyando las tesis de Marruecos, cuya propuesta el Gobierno consideró la «base más realista y creíble», Sánchez viajará a Rabat.
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