Pedro Sánchez ha telefoneado desde Moncloa a Abdelmajid Tebboune, presidente de Argelia, para aumentar sus exportaciones de gas en España.
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Sánchez llama al presidente de Argelia para garantizar el suministro de gas en España. Argelia es un país muy importante porque si aumenta sus exportaciones puede solucionar la dependencia energética europea de Rusia en medio del conflicto armado.
Sánchez llama al Presidente de Argelia
El presidente Pedro Sánchez llamó el domingo 6 por la tarde al presidente de Argelia. Lo hizo para “expresarle su agradecimiento como socio fiable en el ámbito energético”. Además, para expresar su deseo de “reforzar la cooperación”. Esto es, poder comprarle más gas si fuese necesario, según reveló en Twitter la presidencia de la República de Argelia.
Moncloa no informó de esa llamada.
El motivo de la llamada entre Sánchez y el Presidente de Argelia
La gestión de Pedro Sánchez es similar a las que efectuó a finales de febrero la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, son su homólogo argelino, Mohamed Arkab. Por su parte, Italia, el otro gran cliente del gas argelino, envió el lunes pasado a su ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio. Lo acompañó Claudio Descalzi, el consejero delegado del ENI, el conglomerado italiano de los hidrocarburos.
Debido a su enfrentamiento con Rabat, Argel clausuró a finales de octubre el Magreb-Europa, el principal gasoducto que bombeaba gas a España. Lo hace atravesando el territorio marroquí y cruzando el estrecho de Gibraltar. Quiso así no contar con Marruecos en el millón de metros cúbicos con que se quedaba legalmente. Sin embargo, lo cierto es que hizo también un flaco favor a España.
El caso de Marruecos
Por su parte, tanto Teresa Ribera como el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, intentaron sin éxito disuadir a Argel de que tomara tal medida. El ministro Arkab y el presidente Tebboune estuvieron firmes en su decisión de ‘castigar’ a Marruecos. Sin embargo, garantizaron a España que recibiría todo el gas que necesitase a través del segundo gasoducto, Medgaz, que enlaza directamente los dos países. Este oficialmente desemboca en Almería. De esta forma España podría contar con más gas en un futuro próximo.
