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El presidente y líder de Vox, Santiago Abascal, ha sido claro en su respuesta: “No odiamos a los homosexuales”.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha negado este viernes 10 de septiembre que odie a los homosexuales.
Ha rechazado que su partido fomente el odio contra el colectivo LGTBI o inmigrantes. «La dictadura de la corrección política» de la izquierda le intenta «enfrentar con grupos de población”.
“Nosotros no odiamos ni a los homosexuales ni a los inmigrantes ni a las mujeres, nosotros a quien detestamos es a la izquierda, es al Partido Socialista y es a Podemos, y eso tiene un precio: cuando uno se enfrenta a la dictadura de la corrección política sufre todo tipo de insultos y de demonizaciones y se te trata de enfrentar con grupos de población», ha dicho Santiago Abascal en una entrevista para Telecinco.
«De Vox se dicen muchas cosas que son falsas, entre otras que Vox está detrás de la propagación del odio a las personas homosexuales, cuando en Vox hay muchas personas homosexuales, lo que ocurre es que Vox no acepta el discurso de la izquierda ni de determinados ‘lobbies'», ha explicado.
Posteriormente, Abascal ha expuesto la manipulación de Fernando Grande-Marlaska por ser «un mentiroso compulsivo». Hace del «señalamiento a Vox» una «práctica institucionalizada», ha declarado.
«El Gobierno nos tiene enredados en debates sobre falsas agresiones, sobre culpabilización de Vox. No quieren que se hable de las verdaderas dificultades para pagar la factura de la luz«.
Abascal ha hablado también sobre la suspensión de la ampliación de El Prat. Declara que la política española se ha convertido en «un mercado persa».
«Lo hemos visto con la mentira del Gobierno hacia uno de sus socios golpistas, hacia Esquerra Republicana”. Considera que el debate sobre Cataluña es más importante que El Prat. Lo necesario es «la toma del control de la autonomía, la aplicación de un 155 permanente«.
Abascal también se ha preguntado si el Partido Popular finalmente realizará gran acuerdo con el PSOE. Ha explicado que ya está sucediendo en Ceuta. Por último, ha dado su visto bueno al Tribunal Constitucional por fallar e a su favor respecto al segundo estado de alarma.
La reciente transacción de SDLE marca un nuevo rumbo en el sector de defensa en España.