Pedro Sánchez ha anunciado el proyecto "España 2050: Fundamentos y propuestas para una Estrategia Nacional de Largo Plazo".
Este jueves, Pedro Sánchez ha presentado el plan «España 2050», un documento que ha sido elaborado y estructurado con el objetivo de modernizar al país dentro de los siguientes 30 años. El presidente ha estado acompañado por cuatro vicepresidentas; Nadia Calviño, Yolanda Díaz, Carmen Calvo, y Teresa Ribera, además de dirigentes políticos y empresarios.
Sánchez: «España 2050»
El proyecto se ha anunciado en un momento de transformación, en el que el socialista pretende situar a España a la vanguardia de los tiempos. El texto lo han creado más de cien profesionales y expertos anónimos, a los que Sánchez les ha querido agradecer que lo han realizado «con total independencia y sin cobrar un céntimo».
Siendo coordinados por; Estrategia País a Largo Plazo y la Oficina Nacional de Prospectiva de la Moncloa.
El documento recoge hasta 50 objetivos en torno a 9 desafíos. Entre los que destaca, mejorar el sistema educativo para «converger con los países europeos líderes». El presidente recalcó que España necesita ser más productiva, contar con una población mejor formada y promover el uso de las energías verdes.
«Es necesario preparar el Estado del bienestar para una sociedad más longeva «llevar a cabo un desarrollo territorial equilibrado, resolver las deficiencias del mercado de trabajo o reducir la pobreza, la desigualdad y reactivar el ascensor social».
Plan abierto al diálogo
Uno de los puntos destacables, es que Sánchez ha señalado que el plan no es «partidista», sino un conjuntos de prioridades que requiere poner en marcha España. Por ello se ha comprometido:
«Me comprometo a un debate libre, plural, en el que tengan cabida todas las ideas, todas las posturas para crear una estrategia nacional de largo plazo que nos permita fijar prioridades y coordinar esfuerzos. Este es un proyecto de Estado y todo el país tiene que formar parte de él».
Proceso que ha avanzado durará algunos meses pero que estará abierto a la participación de quien quiera. Tanto instituciones como los propios ciudadanos españoles. Su puesta en marcha necesitará de;
«Reuniones bilaterales que se formarán mediante cientos de empresas, patronales, administraciones públicas, sindicatos, ONGs, universidades, fundaciones y partidos políticos».