La salida del líder de Podemos para ser candidato a la Comunidad de Madrid deja al Gobierno con cuatro vicepresidentas.
Pedro Sánchez ha culminado la remodelación de su Gobierno de coalición. Tres movimientos tras la salida de Pablo Iglesias que suponen una nueva ministra y dos movimientos entre las vicepresidencias.
Las vicepresidentas del Gobierno de Sánchez
Nadia Calviño pasa de ser vicepresidenta tercera del Ejecutivo a segunda, ocupando así el lugar dejado por el líder de Podemos, aunque mantendrá la cartera de Asuntos Económicos.
Su puesto será para la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que también seguirá al frente de su Ministerio. La nueva cara es la de Ione Belarra, que pasa de ser secretaria de Estado para la Agenda 2030 a ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030.
El hueco que deja Belarra será ocupado por Enrique de Santiago, diputado de Podemos en el Congreso y secretario general del PCE.
En una comparecencia pública, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quiso dedicar unas palabras a su ya exvicepresidente:
“Deseo agradecer el trabajo del vicepresidente segundo saliente. Nos hemos encontrado el gigantesco reto de la peor crisis que ha vivido la humanidad en los últimos 100 años. Desde nuestras diferentes visiones, la unidad, la responsabilidad y el interés general siempre han prevalecido en nuestro Gobierno de coalición”.
Además, el líder socialista también quiso recalcar que “España se convierte en el sexto país del mundo, el cuarto en la UE, en proporción de mujeres en el Gobierno”, antes de posar para los medios de comunicación con sus cuatro vicepresidentas (Calviño y Díaz, junto a Carmen Calvo, como ‘primera’ y Teresa Ribera, cuarta).
El balance de Pablo Iglesias
La salida de Pablo Iglesias del Gobierno de coalición deja al líder de Unidas Podemos a la cabeza de la lista electoral morada para las elecciones a la Comunidad de Madrid del próximo 4 de mayo. Iglesias se ha despedido de la vicepresidencia con un vídeo en el que ha repasado su paso por el Ejecutivo y en el que ha reconocido «límites y contradiciones». Asimismo, Iglesias ha argumentado que en el año y tres meses que ha ocupado el cargo se ha demostrado que no se puede comprar a Unidas Podemos y que había una forma mejor de hacer las cosas.
