Los países de la UE han dado este viernes 25 de septiembre su aprobación definitiva al préstamo blando de 21.324 millones de euros. Solicitado por el Gobierno de España para financiar los Expediente Temporales de Regulación de Empleo (ERTE), consecuencia de la crisis del Covid-19.
En este momento España tiene que firmar un acuerdo de préstamo con Bruselas en el que se especificarán los tramos y el tipo de interés. El plazo de devolución máximo será de 15 años.
El dinero se obtendrá del fondo Sure, cuya dotación asciende a los 100.000 millones de euros. Se trata de un novedoso instrumento temporal que propuso la presidenta de la Comisión Ursula von der Leyen. Su propósito era amortiguar el impacto de la pandemia en el empleo.
Según las previsiones de la Comisión, el déficit y la deuda de las Administraciones públicas de España se dispararán hasta el 10,1% y el 115,6% del PIB, respectivamente, para el final de 2020. Además, el PIB caerá este año hasta un 10,9%.
El Gobierno de Sánchez ha asegurado que:
«ha aportado a la Comisión las pruebas necesarias de que el gasto público real y previsto ha aumentado en 23.803.573.600 euros desde el 1 de febrero de 2020 debido a las medidas nacionales adoptadas para afrontar las consecuencias socioeconómicas de la pandemia de Covid-19».
Gracias al préstamo aprobado este viernes, España podrá financiar los ERTE, las ayudas a los autónomos, la exención parcial a los empresarios del pago de las cotizaciones a la Seguridad Social para preservar el empleo en el sector del turismo y en el sector de la salud, para los trabajadores que se den de baja debido al Covid-19.
Todos los estados de la UE han presentado los avales necesarios para poner en marcha Sure. El próximo paso es que la Comisión Europea acuda a los mercados para captar los 100.000 millones de euros acordados. La primera emisión se prevee para principios de octubre.
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