Habilitar zonas al aire libre para practicar «botellón». Esta es una idea que se está sobre la mesa en el Ayuntamiento de Girona, de acuerdo con el concejal de Seguridad y Limpieza, Eduard Berloso. «Estamos estudiando una cuestión para prepararnos para el futuro», apuntó.
La información no cayó del todo bien en el sector opositor y ha provocado múltiples críticas.
Tras este anuncio, el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de la localidad, Daniel Pamplona, lo ha calificado como una «frivolidad».
Seguidamente consideró que es un acto irresponsable pensar en esa posibilidad mientras el país sigue luchando contra la pandemia del Coronavirus.
Pamplona indicó que no comprende cómo puede surgir una idea de tal magnitud. Agregó además que en estos momentos en la localidad hay un alto riesgo de rebrotes. Por lo tanto no entiende que se quieran habilitar «botellódromos» cuando hay locales nocturnos cerrados y numerosos autónomos bajando las persianas definitivamente.
Reprochó que en estos momentos, en el que los grupos para socializar fuera de casa se ha reducido a seis personas, el concejal de Seguridad quiera organizar «botellones legales y controlados».
Lluc Salellas, portavoz de la plataforma opositora Guanyem Girona, ha solicitado al Ayuntamiento tener un «mínimo de rigor» a la hora de plantear posibles acciones, mucho más una como la de que el botellón sea legal.
La Federación Catalana de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) ha considerado que el planteamiento de que el botellón pueda ser legal es una «falta de respeto». En un comunicado creen que es inaceptable que permitirlo y no tiene algún tipo de justificación.
La patronal agrega que lo que se debe hacer es permitir la reapertura de locales legales que generan empleo y pagan impuestos. Han solicitado al Ayuntamiento que retire la propuesta. Así mismo, piden que se traslade a la Generalitat una petición para levantar las restricciones a los locales. Aseveran que desde que tienen limitaciones el número de contagios ha aumentado.
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