Pese a las restricciones impuestas por el COVID-19, el Partido Socialista ha vuelto este miércoles al Congreso casi al completo. ¿El motivo? Han renunciado a soltar el voto telemático para sus diputados. De esta manera, el PSOE incumple así en la junta de portavoces de acudir solo el 50% de los diputados al Pleno.
La polémica se ha desatado en el pleno de este miércoles, cuando aún se mantenía vigente el pacto de ocupar la mitad del Salón de Plenos por parte de la junta de portavoces del Congreso. A pesar del pacto, legalmente los diputados tienen derecho a asistir al hemiciclo y nadie lo puede impedir.
Esta vez, eso sí, al contrario que hace una semana, los diputados sí iban con mascarilla.
La bancada socialista, entre la que también se encontraban senadores, ha recibido a Pedro Sánchez en pie y aplaudiendo. El PSOE justifica el incumplimiento de este pacto alegando que el Partido Popular ya ha acudido a algún pleno casi al completo.
En el pleno de este miércoles Pedro Sánchez ha abordado el pacto europeo como un reforzamiento de la política de su Gobierno. Aunque el asunto más recurrente durante la jornada han sido las críticas de la oposición a la bancada socialista.
Los primeros en manifestarse han sido los diputados de Ciudadanos. En el primer receso, Edmundo Bal, portavoz de Ciudadanos, ha pedido a la presidenta, Meritxell Batet, que hiciera cumplir el acuerdo de la Mesa y el decreto de nueva normalidad que obliga a mantener un metro y medio de distancia en espacios cerrados.
Ciudadanos ha reclamado sin éxito a Batet que expulsara a la mitad de los diputados socialistas. «Difícilmente vamos a hacer cumplir las normas si las incumplimos nosotros», señaló el portavoz naranja.
El Partido Popular, por su parte, ha sido muy critico a través de Twitter, y Rafael Simancas, diputado del PSOE, ha respondido por la misma vía.
Sin embargo, esta no es la primera vez que los políticos españoles incumplen las normas que aprueban. En el peor momento de la pandemia en España, Pablo Iglesias y Pedro Sánchez se saltaban el protocolo vigente entonces que obligaba a los contactos estrechos de positivos a mantener aislamiento domiciliario. Muy destacado fue el papel de Iglesias, por ejemplo, que acudió a dar una rueda de prensa a Moncloa tras dar positivo su pareja, Irene Montero.
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