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El ruido es un gran problema en nuestro país, pero siempre que se habla de él se mide el que entra desde los exteriores a los interiores, sin tener en cuenta el que se produce dentro.
En un restaurante, un bar o una oficina, las conversaciones rebotan contra las paredes hasta que al final no se entiende nada, algo que se puede solucionar con los paneles acústicos como los que vende la marca Kaizen.
El problema de la reverberación
Uno de los grandes inconvenientes de los recintos cerrados es la reverberación, un efecto que se produce cuando el sonido rebota contra las paredes, el suelo, los techos, y que podemos comprobar si entramos a una habitación vacía y nos ponemos a hablar.
Esto ocurre en aquellos lugares en donde hay muchas conversaciones a la vez, como los restaurantes, las oficinas, centros de reuniones, etc., y a más personas hablando, más reverberación.
Así, se llega a un punto en el que un camarero no entiende a un cliente cuando le piden algo, o al que es imposible tener una conversación normal con un compañero de oficina.
Este efecto se mitiga con paneles acústicos
Por suerte, para estos locales existen marcas como Kaizen Decor que tienen a la venta paneles acústicos, que se pueden instalar en las paredes, techos y suelos, absorbiendo ese sonido y consiguiendo centros de trabajo mucho más silenciosos.
Sus paneles son de resina PET, el cual procede de plásticos reciclados y se fabrican en España, y además los podemos pedir con acabados ornamentales, lo que permite situarlos en zonas muy visibles como las paredes sin necesidad de disimularlos.
Se convierten así en una decoración perfecta, que resiste muy bien la luz del sol que entra desde el exterior y que termina por desteñir todos los colores, lo que no pasa con estos paneles acústicos.
Seguridad ante los incendios y efecto climatizador
Cuando colocamos un material de este tipo siempre hay que tener muy en cuenta la seguridad, pero Kaizen Decor ya ha pensado en el problema y en el caso de que se queme el material no emite nada de humo.
Otra de sus propiedades a destacar es que tiene un efecto climatizador, lo cual nos va a venir muy bien este invierno, atrapando el calor del ambiente y liberándolo cuando las temperaturas bajan.
Eso, sumado al efecto aislante al poner otra capa a las paredes, techos y suelos, consigue que se ahorre en calefacción, algo que siempre es bueno y más cuando el coste de la energía es tan elevado como ocurre en la actualidad.
No poseen fibras peligrosas
Este material es seguro al 100 %, ya que se ha diseñado para poder estar expuesto. Eso significa que es libre de emisiones, y que no emite fibras que sean peligrosas si las inhalamos, por lo que no hay problema a la hora de colocarlo.
Dadas sus características, ninguna autoridad pondrá inconvenientes para que se instale en cualquier sitio público o por donde pasen muchas personas, lo que junto a sus propiedades lo hacen el mejor material a la hora de acabar con el ruido.
