Descubre cómo Francesca Vaccaro ha transformado el estilo de la primera fila en el Festival de Sanremo.
Un cambio de estilo en el Festival de Sanremo Francesca Vaccaro, esposa de Carlo Conti desde 2012, ha asumido el papel de nueva «Primera Dama» del Festival de Sanremo, aportando un renovado sentido de elegancia y sofisticación. Tras cinco años de looks audaces y extravagantes por parte de Giovanna Civitillo, esposa de Amadeus, el escenario del Ariston se prepara para una era de minimalismo chic.
Vaccaro ha optado por llevar un vestido de tul rosa, ligero y vaporoso, que evoca la imagen de una princesa de cuentos, pero con un toque de picardía que la hace única. El regreso a la sobriedad y la sofisticación Con el fin de la era maximalista, caracterizada por colores flúor y lentejuelas, Francesca Vaccaro marca un regreso a la sobriedad, pero con un enfoque refinado.
Su elección de un elegante traje firmado por Ermanno Scervino, compuesto por una chaqueta de doble botonadura en cady con estampado de rayas y pantalones amplios, demuestra cómo su estilo ha evolucionado. Este look no solo representa un cambio personal, sino que también refleja una nueva tendencia en el mundo de la moda, donde la simplicidad y la elegancia se fusionan en una única visión. Un símbolo de cambio e innovación El vestido que lleva Francesca Vaccaro tiene una importancia simbólica: marca la conclusión del mandato de Amadeus y su influencia en el estilo del Festival. Vaccaro, ex vestuarista de Rai y ahora directora creativa de una marca ecosostenible, COUTŪ, ha demostrado que la moda puede ser tanto elegante como sostenible. Su elección de accesorios, como las sandalias de satén negro con una flor hecha a mano, completa un look que es a la vez sofisticado y accesible. Un ícono de estilo para el futuro Francesca Vaccaro ha demostrado ser un ícono de estilo no solo para el Festival de Sanremo, sino también para el público que la sigue. Con su enfoque en el minimalismo y la sostenibilidad, está abriendo el camino a una nueva generación de mujeres que buscan expresar su personalidad a través de la moda. Su presencia en el Festival no es solo un momento de glamour, sino una oportunidad para reflexionar sobre cómo la moda puede evolucionar de manera responsable y consciente.
