Durante esta semana tendremos la llegada de "una borrasca atlántica profunda que se irá aproximando a España y en especial a la península".
Llega a España una borrasca atlántica: varias provincias están en alerta. A partir del martes, 25 de octubre, las últimas predicciones apuntan a que el tiempo será estable.
Llega a España una borrasca atlántica
Durante esta semana tendremos la llegada de «una borrasca profunda que se irá aproximando a la Península».
Todo ello para situarse frente a las costas de Portugal. Así lo explica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en su blog. Añaden que sus frentes afectarán en mayor medida a la mitad occidental peninsular. «No se descarta que puedan extenderse por la mitad oriental de forma débil y dispersa.
Las zonas donde las precipitaciones serán menos probables la próxima semana son el sureste peninsular y el archipiélago balear«, explica la AEMET. Este 17 de octubre estará marcado por la inestabilidad. «Las tormentas y los chubascos se darán a lo largo del territorio, pero las más importantes se concentrarán en el noroeste e interior del país», explican.
La península
A partir del martes, 25 de octubre, las últimas predicciones apuntan a que el tiempo será estable. Sin embargo, el miércoles un nuevo frente llegará desde el oeste. Vendrá con fuertes lluvias en Galicia y otros puntos de la mitad occidental, añaden. Respecto a las temperaturas, la AEMET incide en que irán «ascendiendo y descendiendo de acuerdo con el paso de los frentes». De esta forma, las temperaturas se reducirán ligeramente en la mitad occidental al paso del frente. Según las previsiones, las temperaturas «serán elevadas hasta el martes». Por su parte, «el acercamiento de una borrasca a la Península, con aire más fresco en capas medias, podría bajar los termómetros de cara al miércoles».
La previsión
Actualmente la previsión es que «la zona depresionaria consiguiese avanzar algo más al este”. Por ello gran parte de la Península «quedaría bajo la masa de aire atlántica, más templada». En este sentido, las temperaturas todavía seguirían elevadas para esta época del año, aunque serían más suaves y cercanas a lo normal. «La mayor excepción se encontraría en la mitad este, donde la masa de aire seguiría siendo más cálida».