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Tras la erupción del volcán de Cumbre Vieja en la Palma, los científicos analizan las probabilidades de que otros volcanes, como el Teide, entren en erupción.
Tras la erupción del volcán en la isla de La Palma y más de una semana sufriendo su fuerte actividad, muchos canarios se preguntan por las probabilidades de que otros volcanes presentes en el archipiélago pudieran también entrar en erupción.
El Teide, según los expertos, continúa ‘vivo’ y es susceptible de despertar de su letargo en cualquier momento. Pero recalcan que, de momento, no hay indicios de que ello vaya a suceder en breve. El más famoso de todos los volcanes españoles, es también uno de los potencialmente más destructivos por sus características.
Ni el Teide, ni ninguna otra estructura volcánica de la propia isla de La Palma, ni las que hay en las demás islas canarias tienen que ver con el proceso del volcán. Involcan, insiste en que «la mayoría de sistemas volcánicos son independientes y no están interconectados entre sí».
El Teide es uno de los volcanes que tiene la isla, pero no el único. Es un volcán del tipo poligenético, es decir, que ha tenido varias erupciones y en cada una de ellas ha ido creciendo. La última erupción de el Teide se produjo en 1798, hace ya más de dos siglos.
Los vulcanólogos consideran al Teide como un volcán potencialmente peligroso. La erupción de el Teide puede ser de dos formas: mediante procesos violentos y explosivos (la típica imagen de lava saltando por los aires a gran altura) o bien efusivos, con emisión de lava pero sin un carácter explosivo.
Así, la erupción del volcán de Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, nada tiene que influir en la actividad del Teide.
La Asociación Internacional de Vulcanología y Química del Interior de la Tierra (IAVCEI) publicó una lista con los 16 volcanes más peligrosos de la Tierra. En Europa están el Vesubio y Campi Flegrei (Italia), Santorini (Grecia) y Teide (España).
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