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Con la intención de reducir la emisión de residuos de carbono, y como parte del plan: España 2050, el Gobierno de Pedro Sánchez pretende eliminar los trayectos cortos en avión. Esto afectaría a los vuelos que se realizan en menos de dos horas y media, y que pueden ser realizados a través de transportes complementarios como el tren.
Con la intención de ser “una sociedad neutra en carbono, sostenible y resiliente al cambio climático”, Pedro Sánchez presentó el plan sostenible España 2050. Un proyecto cuyo principal fin es la de reducir el impacto ambiental; por lo que, se implementarán mayores impuestos, sin dejar de bridar más protección social, y limitar el uso de aviones y coches.
Así, el primer objetivo es con relación a los desplazamientos aéreos; y en particular, los traslados cortos. De tal forma, para desmotivar el uso del avión, en este tipo de trayectos, se aplicarán medidas como la siguiente: aplicación de una tasa impositiva para “viajeros frecuentes” (en avión); o bien, aplicar un impuesto complementario a billetes de avión dependiendo la cercanía con el destino.
No son muchas las rutas aéreas que también se pueden realizar por tren. Particularmente, son tres los trayectos que cumplen, de momento, con las condiciones establecidas, y estos son:
Dependiendo de los avances tecnológicos y la creación de línea de alta velocidad, esta medida podría afectar a más rutas; incluyendo, varias que se encuentran al norte del país (País Vasco y Galicia) y Extremadura. Mientras que otros trayectos, no se verán afectados, mientras que no exista una constante demanda de vuelos regulares.
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