Una borrasca azotará la península durante el fin de semana
El verano se despide pasado por agua debido a un amplia borrasca que entrará en la península a partir del jueves, 16 de septiembre, y dejará abundantes luvias, tormentas y granizo por todo el territorio español. La borrasca estará en la península hasta el próximo lunes, día 21, dejando a su paso un descenso progresivo de las temperaturas, sobre todo por las mañanas.
El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo, ha explicado que el frente ya esta situado sobre el atlántico y que “sufrirá un proceso de intensificación” a medida que vaya avanzando hacia el sur, afectando en mayor o menor medida a todas las regiones de la península a excepción de los dos archipiélagos.
Los efectos, que comenzaron a notarse a principios de semana cuando las tormentas afectaron a numerosos puntos de la región, continuarán desarrollándose de forma dispersa hasta el jueves, que será cuando más notemos su presencia.
Tal como apunta del Campo, el jueves la borrasca estará lo suficientemente próxima a la península para que pueda penetrar el primer frente, el cual afectará a extremo occidental, sobre todo al norte de Extremadura, sur de Castilla y León, Asturias y al este de la meseta norte.
El experto también ha incidido en que el aumento de la inestabilidad y la gran cantidad de humedad, debido a la “succión que realiza la propia borrasca de aire subtropical” favorecerán los chubascos localmente fuertes acompañados de tormentas y granizos. Ante esta situación se salva el área mediterránea, quedando al margen.
Desde la Aemet se espera que el centro de la borrasca desvíe su rumbo el viernes. De esta manera, primero se dirigiría hacía el este, llegando a alcanzar el sur de Portugal, y posteriormente, alcanzando de sur a norte por todo el extremo occidental peninsular. Esto ultimo ocurriría durante el fin de semana.
Los frentes dejarán lluvias generalizadas, sobre todo en aquellos territorios situados al sur de los grandes sistemas montañosos, puesto que “retienen la nubosidad”, acompañadas de intervalos de viento fuerte de componente sur, explica del Campo.
Estas precipitaciones afectarán mayormente al norte de Extremadura, norte y sur de Castilla y León, norte de la Comunidad de Madrid, Aragón y Cataluña. Al litoral y prelitoral mediterráneos llegarán “muy desgastadas y Canarias quedará al margen”.
La Aemet confía que el lunes la borrasca se aleje por el Cantábrico camino al sur de las Islas Británicas, quedando las lluvias restringidas al tercio norte de la península.
Respecto a las temperaturas, “los vientos del sur y la abundante nubosidad no dejarán que bajen demasiado las nocturnas”, asevera del Campo. Sin embargo, las diurnas si que irán bajando progresivamente.
El descenso de estas será más notable el viernes, provocando un descenso de hasta 6-10 grados menos en el interior peninsular. Esto dejará un ambiente “algo fresco” en las mesetas de Andalucía y sur de Galicia. Mientras que en el área mediterránea y la cornisa cantábrica las temperaturas serán algo más altas de los habitual, pudiendo superarse hasta los 30 grados, especialmente en el País Vasco.
Las lluvias torrenciales y sus efectos en la población y la infraestructura española
Análisis de la gestión de emergencias tras la devastadora dana en Valencia