Oakley ha diseñado un nuevo modelo de gafas de sol que son “ecológicas” por sus materiales supuestamente orgánicos y reciclados y que saldrán al mercado en julio.
Llevan por nombre Bob Burnquist Gascan y son una versión especial de la línea de gafas Oakley Gascan.
Bob Burnquist es un deportista famoso (un skater) por apoyar iniciativas verdes de concienciación ambiental.
Una parte del producto de las ventas irá a la Action Sports Environmental Coalition (ASEC), una organización co-fundada por Burnquist en 2001.
Por si les interesa el auto-bombo del presidente de Oakley, Colin Baden, esta es la motivación para este nuevo modelo de gafas: Esta nueva versión no sólo homenajea el talento y el estilo de un gran atleta, sino también los esfuerzos que está realizando en su campaña para aumentar la concienciación sobre cuestiones ambientales.
Bob ha sido parte de la familia Oakley durante muchos años, y siempre hemos sido inspirados por sus logros en skate y su defensa de las iniciativas verdes.
Con sus materiales ecológicos, las Bob Burnquist Gascan son un hito en el diseño de gafas que ayuda a apoyar una causa noble al mismo tiempo cierra la brecha entre la innovación técnica y la manera de pensar ecológica.
(Traducción libre)Veamos de cerca estas gafas: para el marco o patillas, utiliza materiales sobrantes de la fabricación de otras gafas.
Eh, sí, es un poco pillado por los pelos, a saber con qué plástico chungo están hechas las gafas de Oakley, pero en fin.
La funda de las gafas, eso sí, son naturales, biodegradables, y hechas de bambú 100% orgánico.
Para que no se diga que sólo hacen la funda con eso, el icono de la marca, inserido en las patilla también están hechas de bambú… Tras estrujarse el cerebro para ver qué otro detallito se podían marcar, Oakley utiliza materiales reciclados para el packaging y tintas ecológicas para su diseño gráfico.
Ahora podría seguir explicándoles los diferentes colores con que vienen las gafas, decirles que el material de los cristales, hechos de Plutonite, bloquean todos los rayos UVA, UVB y UVC, y bueno, cuatro cosas más.
Pero como en Oakley no me pagan comisión, esto me parece ya demasiada publicidad gratis.
Total, ¿para qué? Para un nuevo producto que se vende como ecológico cuando, en realidad, a lo sumo es una buena campaña publicitaria que ha servido para que, también en este blog, se hable de Oakley.
Mea culpa.
Soy tonto.
Por favor, no compren esas gafas.
Vía