Piet Martens, físico solar de la Universidad Estatal de Montana, dice que él y dos colegas científicos han resuelto el misterio detrás de la desaparición de las manchas solares.
La investigación, que será publicada mañana en la revista Nature, muestra que los campos magnéticos inusualmente débiles en el Sol, junto con una reducción de la actividad solar, causan que las manchas solares desaparezcan.
Aunque está bien documentado que nuestra estrella pasa por ciclos regulares de once años de actividad alta y baja, las manchas solares no son propensas a desaparecer durante un periodo prolongado.
Sin embargo, lo hicieron entre 2008 y 2010 .
Como explica Reuters, las manchas solares parecen a la vista humana como puntos oscuros en el Sol.
Son causados por una intensa actividad magnética, o tormentas, en la superficie del Sol.
Estas manchas a menudo emiten partículas hacia el espacio, conocidas como erupciones solares.
Martens y un equipo de investigadores usaron telescopios espaciales para recoger información sobre la superficie del Sol, documentaron las manchas solares, las erupciones solares y la fuerza de los campos magnéticos en los polos norte y sur del Sol.
Usando computadoras para modelar la superficie del Sol hace más de dos mil años, el equipo rastreó un vínculo entre la ausencia de manchas solares y la debilidad de los campos polares.
A estas alturas deberíamos estar familiarizados con estos términos.
A juzgar por ciertas predicciones, en este momento tendríamos que estar todos achicharrados o, mejor, no estar en lo absoluto.
Esto debido a las llamaradas solares que alcanzaron la Tierra el 18 de febrero, sin mayores efectos para el planeta, según la NASA, pero anuncio de una apocalíptica predicción Maya, según otros.
Las manchas solares han sido objeto de debate no sólo en astronomía sino también en climatología.
Dos estudios que establecen un vínculo entre la temperatura global y las manchas solares, publicados en 1991 y 1998, siguen siendo citados actualmente como evidencia por quienes sostienen que el cambio climático es un fenómeno natural y no creado por la actividad humana.
Sin embargo, destacados científicos, entre ellos un Premio Nóbel, declararon en 2009 que estas pruebas científicas son profundamente defectuosas.
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