Una cadena humana de 120 kilómetros de largo, formada por 120.
000 personas, sirvió hoy para visualizar la repulsa de muchos alemanes ante la energía nuclear y, particularmente, ante los planes del gobierno de la canciller Angela Merkel de dejar sin efecto el plan de cierre paulatino de todas las centrales atómicas hasta 2022 y el de no construir ninguna nueva.
La larguísima cadena humana se formó siguiendo el cauce del río Elba, en la zona norte del país (donde se ubican 3 de las 17 centrales nucleares de Alemania).
Los manifestantes lograron unir la planta nuclear de Brunsbüttel, cerca de la desembocadura del Elba en el mar del Norte, y la de Geesthacht, al sureste de Hamburgo.
Jochen Stay, uno de los dirigentes del movimiento antinuclear alemán, manifestó lo siguiente al respecto de los planes de reactivar la energía nuclear:No pararemos hasta que el gobierno archive sus planes de reactivar la energía atómica en el país.
La fecha elegida para esta manifestación, que transcurrió pacíficamente sin incidentes, no es casual: pasado mañana se cumplirá el 24 aniversario del mayor accidente nuclear de la historia, el de Chernobyl.
Vía
