Este no es un blog de cotilleo, de acuerdo, pero tanto hablar de los scuppies y de las campañas ecológicas de algunas celebridades, me ha apetecido curiosear a ver cuán ecológicos eran algunos famosos, y en mi búsqueda he encontrado desde actos desmesurados como liarse a palos contra otra celebrity que lucía unas pieles (Pink contra Beyoncé – que digo yo que había maneras más finas y más persuasivas), hasta ser uno de los primeros en pasearse en un Tango (un coche eléctrico de la marca Commuter Cars), como George Clooney… aunque, la verdad, no me imagino a Clooney en uno de esos aparatos.
Algunos prestan su cara (y sus otras cosas) a campañas más o menos ecológicas y hasta hay quien, como DiCaprio, divide su propia web en dos: autobombo por un lado, y concienciación ecológica por el otro.
No sé yo quien beneficia a quién, o quien sale mejor parado, si se quiere (si el famoso o el planeta); imagino que la etiqueta ecológica vende tanto o más que la etiqueta solidaria (si hasta Vanity Fair saca una especie de ranking con Vanity Fair Green Issue), pero mira, oye, si entre cóctel y cóctel, y entre contrato millonario y contrato millonario, les da para salvar un bosque (o veinticinco), no seré yo quien se lo impida…¿No haríais vosotros lo mismo?Fotografía
