¿Cuántas veces escucháis que un vegetal pasa a tener un status de protección? Esta es una de esas pocas.
No es que el ruibarbo forzado de Yorkshire esté en peligro de extinción -aunque hay que decir que sólo un puñado de agricultores lo cultivan- pero sí pasa que su nombre es usado con demasiada ligereza.
Por ello la Unión Europea ha decidido conceder a esta variedad de planta un status de protección.
Ello quiere decir que, al igual que pasa con la champaña o el jamón de Parma en sus respectivas regiones de Francia e Italia, sólo aquellos ruibarbos que hayan sido cultivados en el triángulo delimitado por las poblaciones inglesas de Bradford, Wakefield y Leeds podrán ser llamados ruibarbos forzados de Yorkshire.
Ha nacido otra Denominación de Origen Protegida.
El negocio queda así limitado a sólo doce agricultores que aún mantienen el tradicional método de cultivo que fue creado especialmente para el tipo de suelo del centro-norte de Inglaterra, y que da como resultado este ruibarbo rosado, dulzón y muy valorado en su país de origen.
De hecho, investigadores de la Universidad Sheffield Hallam y del Instituto de Investigación Scottish Crop señalan en un estudio que esta variedad de ruibarbo, cocinada durante 20 minutos, aumenta los niveles de sustancias anticancerígenas en el organismo.
De acuerdo con The Telegraph, en los últimos años el ruibarbo forzado de Yorkshire había estado amenazado por la caída de la demanda y la imitación de su método de cultivo en Holanda.
Fue en 2008 cuando los agricultores que se dedican al ruibarbo de Yorkshire pidieron ante el Parlamento Europeo que la Comisión Europea concediese a esta planta la categoría que ahora ha conseguido.
Richard Corbett, el parlamentario inglés que presentó la petición ante el Parlamento, explicó:el peculiar clima de Yorkshire y las técnicas especiales desarrolladas por generaciones de agricultores han garantizado la calidad particular de este ruibarbo, que se cultiva trasplantando las raíces a naves oscuras, y la oscuridad obliga a que los tallos crezcan buscando la luz y producen una calidad muy especial que muchos cocineros de renombre y los restaurantes más selectos tildan de exquisitez excepcional.
Pido a la Comisión que le conceda esa categoría.
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